MADRID, 12 Nov. (EUROPA PRESS) -
La diabetes tipo 2 es una enfermedad crónica debido a la cual "cada ocho segundos muere una persona", según el Director Médico de Novo Nordisk, Francisco Pajuelo. De no tratarse adecuadamente, esta patología conlleva una serie de complicaciones que "pueden resultar una amenaza para la vida del paciente", ha asegurado el especialista en conmemoración del Día Mundial de la Diabetes.
En esta fecha se pretende sensibilizar y concienciar a las personas con diabetes de la necesidad de un control adecuado y llamar la atención de todos aquellos susceptibles de desarrollarla ya que la diabetes tipo 2 se puede prevenir. Sin embargo, entre las complicaciones derivadas del mal control terapéutico de esta condición crónica, se encuentran las amputaciones, la pérdida de visión, la nefropatía y las enfermedades
cardiovasculares.
Tal es así que una reciente encuesta, en la que han participado 12.695 personas con diabetes tipo 2, elaborada por la Federación Internacional de Diabetes (IDF), con el apoyo de Novo Nordisk, ha puesto de manifiesto que dos de cada tres personas con diabetes tipo 2 tenían factores de riesgo de enfermedad cardiovascular, tales como presión arterial alta, niveles de glucosa en sangre no controlados y colesterol alto; y/o habían experimentado un episodio de enfermedad cardiovascular como angina, infarto de miocardio, ictus o insuficiencia cardiaca.
Sin embargo, uno de cada cuatro encuestados nunca había hablado con su doctor sobre los factores de riesgo de las enfermedades cardiovasculares y, solo uno de cada cuatro consideraba que tenía un bajo riesgo de enfermedad cardiovascular. Datos que, para el presidente de la IDF, Nam H. Cho, revelan que la concienciación sobre los riesgos y consecuencias de la enfermedad "continúa siendo escasa" y la educación para abordar las complicaciones de la diabetes es "deficiente".
Actualmente, la diabetes afecta a 425 millones de adultos mundialmente. Las enfermedades cardiovasculares, las cuales incluyen el ictus, la enfermedad coronaria y la enfermedad arterial periférica, constituyen la principal causa de discapacidad y muerte en personas con diabetes tipo 2.