MADRID, 4 Ago. (EUROPA PRESS) -
Científicos de la Facultad de Medicina Yong Loo Lin de la Universidad Nacional de Singapur han creado un probiótico que restablece el metabolismo de las sales biliares, presentes en el tracto gastrointestinal, para contrarrestar la aparición y los efectos de la infección por 'Clostridium Difficile' (CDI).
La CDI es una infección del intestino grueso o del colon que provoca una diarrea infecciosa, causada por una bacteria infecciosa conocida como 'Clostridium'. Se ha observado que la mayoría de los casos de CDI se dan en personas que han estado tomando antibióticos o que acaban de terminar su tratamiento con ellos.
La administración de antibióticos en el tratamiento de la CDI provoca un desequilibrio del microbioma intestinal, conocido como disbiosis, que puede alterar otros procesos del microbioma, como el metabolismo de las sales biliares. La desregulación del metabolismo de las sales biliares puede activar las esporas latentes de 'Clostridioides difficile', dando lugar a la CDI, causando diarrea grave y colitis (inflamación del intestino grueso) o una reinfección de la CDI.
En su trabajo, publicado en la revista científica 'Nature Communications', este equipo de investigadores ha diseñado un probiótico capaz de detectar la aparición de un desequilibrio en el microbioma inducido por los antibióticos y de expresar una enzima capaz de regular el metabolismo de las sales biliares tras su detección. Este probiótico contiene un circuito genético que comprende un sensor, un amplificador y un actuador codificados genéticamente.
El equipo utilizó una cepa probiótica de 'E. coli' como huésped debido a su probado historial de seguridad en humanos y a que su naturaleza gramnegativa la hace compatible con la terapia actual de la CDI que utiliza antibióticos dirigidos a las bacterias grampositivas.
El sensor de este probiótico detecta la presencia de ácido siálico, un metabolito intestinal que indica un desequilibrio del microbioma. El actuador produce una enzima que puede regular el metabolismo de las sales biliares, activada por el sensor, y reduce la germinación de las esporas de 'Clostridioides difficile' que causan la CDI, cuando es inducida por el sensor de ácido siálico.
El equipo también incluyó un amplificador en el probiótico que amplifica la activación por el sensor y aumenta la producción de la enzima, reduciendo la germinación de las esporas de 'Clostridioides difficile' en un 98 por ciento. Los experimentos mostraron que el probiótico redujo significativamente la CDI en modelos de laboratorio, como lo demuestra una tasa de supervivencia del 100 por cien y la mejora de los resultados clínicos.