MADRID, 11 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los adivitivos de pirazina en los cigarrillos con bajo contenido de alquitrán (los denominados 'light') y los cigarrillos electrónicos pueden reforzar las cualidades adictivas de la nicotina y deben ser regulados estrictamente, según afirman los autores de un estudio publicado en la edición digital de la revista 'Tobacco Control'.
La evidencia sugiere que las pirazinas tienen efectos sensoriales y farmacológicos que actúan independientemente y en conjunto con la nicotina y fueron desarrollados por la industria del tabaco para hacer los cigarrillos bajos en alquitrán con un sabor más rico y más suave, y aumentar las ventas.
CIGARRILLOS ELECTRÓNICOS Y DEPENDENCIA DE LA NICOTINA
La dependencia de la nicotina es un proceso complejo, pero es causado principalmente por la capacidad de la nicotina de provocar la liberación en el cerebro de la dopamina, una sustancia química involucrada en el placer, la excitación y el cambio de humor.
Sin embargo, un creciente cuerpo de evidencia sugiere que la nicotina por sí sola no es responsable de las intensas propiedades adictivas del consumo de tabaco y la alta tasa de recaídas entre las personas que intentan dejar su hábito utilizando productos de reemplazo de nicotina.
Los investigadores rastrearon los documentos internos de la industria tabacalera puestos a disposición a finales de los años 90 como resultado de litigios y revisaron la investigación científica sobre la composición y el papel de los aditivos de los cigarrillos.
La industria del tabaco desarrolló cigarrillos bajos en alquitrán por la creciente preocupación por el impacto perjudicial sobre la salud del consumo de tabaco y una continua disminución de las ventas de cigarrillos a partir de la Segunda Guerra Mundial. Pero estas versiones con bajo contenido de alquitrán carecían del sabor y el aroma de los cigarrillos normales.
Los documentos revelan que Philip Morris quería fabricar cigarrillos con alquitrán aún más bajos, pero con un sabor y aroma que satisficiera a los "paladares y las necesidades" de los fumadores.
La compañía llevó a cabo una investigación para identificar los componentes que se asociaron con una intensidad del olor más fuerte de entre los muchos productos químicos aromáticos y las sustancias en el humo del tabaco normal y luego hizo versiones sintéticas que se incluyeron en los cigarrillos bajos en alquitrán.
El resultado fue la exitosa marca MERIT, que fue el primer cigarrillo 'light' y comercializado como un producto con pleno sabor con menos de 9 mg de alquitrán. Philip Morris llamó la nueva combinación de sabores 'Super Juice', que está compuesto de cinco aditivos, incluyendo tres pirazinas, compuestos aromáticos formados a temperaturas de 100 grados o más y generados durante el curado de la hoja de tabaco y al fumar, y ahora ampliamente utilizado en las marcas de cigarrillos.
Se dice que las pirazinas están entre los compuestos más importantes que caracterizan el sabor, el aroma y el humo del tabaco, aportando las "notas de color marrón" en general y, en algunos casos, sabores como el cacao, la nuez y las palomitas de maíz.
Aparte del sabor y el aroma, las pirazinas son conocidas por actuar sobre los receptores sensoriales. Los documentos muestran que la industria identificó un papel de las pirazinas en suvaizar el tabaco, lo que puede facilitar la inhalación, absorción y la entrega de la nicotina al frenar la dureza y los efectos irritantes de la nicotina y otros ingredientes del humo de tabaco, según los investigadores.
Los documentos de la industria indican que estos compuestos podrían promover una alta aceptación de los consumidores y un consumo continuado. La investigación de laboratorio también sugiere que la estimulación de los receptores de pirazina en el revestimiento de la nariz puede aumentar el comportamiento aprendido, ya sea actuando solo o en combinación con otros estímulos sensoriales.
Y varios derivados de la pirazina parecen tener un papel en el impulso de la cantidad de dopamina liberada durante el acto de fumar, un efecto que es independiente de la nicotina, indican los estudios.
"Las aportaciones sensoriales de los aditivos pirazinas también pueden proporcionar señales de conductas aprendidas relacionadas con la recompensa y podrían desempeñar un papel fundamental en el desarrollo, mantenimiento y recaída de la dependencia del tabaco", escriben los investigadores. "Podrían aumentar el atractivo de fumar, especialmente entre los jóvenes", sugieren.
"En conjunto, las pirazinas parecen aumentar el atractivo del producto y hacerlo sea más fácil para los no fumadores para empezar a fumar, más difícil para los fumadores actuales dejar de fumar, mucho más fácil para los exfumadores recaer en el tabaquismo y pueden enmascarar los riesgos de fumar activamente o el humo pasivo", concluyen, reclamando a los legisladores de todo el mundo que tomen medidas rápidas para regular las pirazinas y otros ingredientes similares.