MADRID 24 Mar. (EUROPA PRESS) -
Un nuevo estudio de la Universidad del Sur de Florida (USF) es el primero en proporcionar evidencia directa de que la contaminación lumínica está impulsando los patrones de enfermedades infecciosas en la naturaleza y aumenta el riesgo de contraer el virus del Nilo Occidental, según publican los investigadores en la revista 'en Proceedings of the Royal Society B'.
El equipo de investigación determinó previamente que los mosquitos y las aves se sienten atraídos por la luz, lo que aumenta en gran medida la probabilidad de que transmitan el virus del Nilo Occidental a animales y humanos. Sus nuevos hallazgos contrastan con estudios anteriores que han culpado a la urbanización debido a su densidad de población humana y puntos críticos de reproducción, como los sistemas de drenaje.
"Sabíamos que la contaminación lumínica podría afectar las defensas inmunitarias y el comportamiento del huésped --añade la autora principal, Meredith Kernbach, estudiante de doctorado en la Facultad de Salud Pública de la USF--. Pero lo que no sabíamos hasta ahora es que la contaminación lumínica puede afectar significativamente cuándo y dónde emerge el virus del Nilo Occidental en la naturaleza".
El equipo de investigación, que incluye colaboradores de la Universidad de Georgia y la Universidad Estatal Politécnica de California, modeló los datos de exposición al virus del Nilo Occidental del Departamento de Salud de Florida.
Estudiaron 6.468 muestras de anticuerpos de pollos centinela recolectados entre los meses de junio y diciembre durante cuatro años en 105 ubicaciones de cooperativas en todo el estado. Los investigadores encontraron que la mayoría de los casos del virus del Nilo Occidental estaban presentes en pollos expuestos a bajos niveles de luz en comparación con aquellos rodeados por áreas no contaminadas e intensamente contaminadas por la luz.
"Creemos que obtuvimos un pico en niveles bajos de luz debido a las muchas formas en que la contaminación lumínica probablemente está impulsando el riesgo de infección", explica Marty Martin, profesor de ecología de enfermedades en el Centro de Investigación de Enfermedades Infecciosas y Salud Global de la USF.
"Según trabajos anteriores, sabemos que la contaminación lumínica afecta la respuesta inmunitaria de las aves al virus del Nilo Occidental, pero probablemente también haya un efecto sobre la abundancia de mosquitos, ya que la mayoría de los insectos se sienten atraídos por la luz --añade--. Incluso las aves pueden sentirse atraídas por lugares contaminados por la luz, ya que la comida podría ser más abundante u obvia allí. Tal vez todas estas fuerzas juntas sean lo que eleve el riesgo en sitios moderadamente contaminados por la luz".
Muchos departamentos de salud de los condados utilizan pollos centinela como mecanismo de vigilancia para monitorear el virus del Nilo Occidental y otras enfermedades transmitidas por mosquitos. Por lo general, no enferman por el virus y no pueden transmitirlo a mosquitos, personas u otras aves.
Los condados colocan estratégicamente las cooperativas en los lugares que mejor representan a la población humana local, lo que ayuda a identificar dónde dirigir los esfuerzos de mitigación que pueden prevenir la propagación de la infección.
Estos hallazgos respaldan un estudio de 2019 de la USF que encontró que la exposición a la luz artificial aumenta el período de infección de las aves silvestres, aumentando el potencial de brotes del virus del Nilo Occidental en un 41 por ciento.