MADRID, 26 Mar. (EUROPA PRESS) -
Debemos tener mucho cuidado con los golpes que nos damos en la cabeza. Estos son habituales, ¿quién no se ha dado un coscorrón alguna vez?, pero en muchas ocasiones podemos hacernos más daño del que nosotros queremos.
El doctor Luis Ley Urzaiz es el jefe del Servicio de Neurocirugía del Hospital Ramón y Cajal de Madrid y nos explica para Infosalus qué es una conmoción cerebral, una lesión que se produce en el cerebro, y provocada por un golpe en la cabeza.
"Es la lesión más leve e indica una mal función cerebral secundaria a una lesión traumática, sin que las pruebas de imagen demuestren lesión orgánica. Es decir, se produce una alteración de función del cerebro (habitualmente una pérdida de conocimiento breve o una amnesia de lo ocurrido también breve), sin que las pruebas de imagen habituales demuestren lesión del tejido cerebral", explica este experto.
Las conmociones cerebrales son fruto de causas traumáticas, es decir, por golpes, según prosigue, siendo súper frecuentes y además en cualquier ámbito de la vida: "Accidentes domésticos, deportivos, por ejemplo; en definitiva, cualquier golpe en la cabeza que nos deje atontados un rato puede considerarse una conmoción".
SÍNTOMAS Y TRATAMIENTO DE CONMOCIÓN CEREBRAL
Entre sus síntomas, el neurólogo subraya que son variados, pero habitualmente apunta a una alteración del nivel de conciencia breve, ya sea inconsciencia (el accidentado no responde a nuestros estímulos), o bien contesta incoherencias, está más lento, no se acuerda, entre otras situaciones, por ejemplo. Posteriormente, dice que es habitual un periodo de dolor de cabeza y de cansancio.
El doctor Ley Urzaiz sostiene en este punto que el diagnóstico es clínico, es decir, en él se valora la intensidad del golpe y la exploración neurológica del accidentado. "En muchas ocasiones se realizará una prueba de imagen, que no siempre es necesaria. Sí hay datos que puedan indicar una mayor gravedad, como en pacientes anticoagulados, accidentes de alta energía, conmociones de repetición, por ejemplo", agrega.
Sobre el tratamiento, el jefe del Servicio de Neurocirugía del Hospital Ramón y Cajal de Madrid apunta que el mejor consiste en evitar esos golpes o traumatismos a través de las medidas de protección, como por ejemplo los protectores craneales en boxeo o los cascos en las bicicletas.
"El tratamiento es sintomático, con analgesia y reposo. El reposo es importante en varios sentidos: el primero para evitar que se repita otro traumatismo, ya que se sabe que la repetición de la conmoción cerebral puede llevar a cuadros graves de demencia, como se ha demostrado en el campo del boxeo y en el fútbol americano recientemente", subraya.
De hecho, mantiene que hay países como Estados Unidos que son muy estrictos en el manejo de las conmociones deportivas en el deporte profesional y en el amateur, incluyendo deporte infantil y juvenil. "Estos pacientes se recuperan totalmente si se trata de un accidente aislado, si bien si la conmoción se repite frecuentemente, como en el caso de deportes de contacto, puede provocar, de manera crónica, cuadros de demencia", advierte.
Eso sí, el doctor Ley Urzaiz señala que, en general, y si no se realiza el preceptivo descanso pueden condicionar estados más o menos prolongados de dolor de cabeza, problemas de concentración, entre otros, y que pueden durar uno o dos días.
"Recordar que son lesiones cerebrales que indican una violencia suficiente como para que el cerebro se resienta, y que sabemos que si se repiten con frecuencia pueden conducir a un cuadro de demencia precoz", insiste el neurólogo del Hospital Ramón y Cajal.