MADRID, 12 Oct. (EDIZIONES) -
Entramos en una nueva estación, el otoño, y en él podemos encontrarnos alguna patología ocular que, aunque realmente ocurre durante todo el año, si bien es en esta época del año donde puede ser especialmente prevalente. Esto sucede con los orzuelos, la blefaritis, las conjuntivitis alérgicas, y el ojo seco, en el que centramos este artículo.
Según explica el doctor Enrique Artiaga Elordi, oftalmólogo del grupo Oftalvist, el ojo seco es un problema crónico que está presenta durante todo el año, aunque es cierto que determinados factores ambientales del otoño pueden provocar un empeoramiento de los síntomas, condiciones como cambios de temperatura, viento, determinados alérgenos, entre otros.
Es una enfermedad que ocurre por alteraciones en la lágrima, tanto porque produzcamos poca cantidad o porque la lágrima producida no sea de una calidad adecuada, subraya el especialista en una entrevista con Infosalus.
Y es una patología multifactorial, según prosigue, es decir, que tiene muchas posibles causas como pueden ser la edad, cambios hormonales en las mujeres, ingesta de determinados medicamentos (antihiperetensivos, antialérgicos, ansiolíticos...), determinadas condiciones ambientales, el trabajo con pantallas, el estrés, enfermedades autoinmunes, reumatológicas, el uso prolongado de lentes de contactos, algunas cirugías oculares, entre otros.
Entre sus síntomas, el doctor Artiaga afirma que se pueden encontrar una gran variedad: Es frecuente que la gravedad de los síntomas que nos refiere el paciente no tenga un reflejo proporcionado con los síntomas que encuentra el oftalmólogo en la exploración y esto es algo que el profesional debe tener en cuenta.
Así, dice que son típicos el escozor, el picor, la sensación de arenilla o de cuerpo extraño, así como de quemazón, incluso en ocasiones dolor, sensación de pesadez y no es infrecuente encontrar disminución de la agudeza visual.
Se debe consultar lo antes posible con un especialista, según incide el experto de Oftalvist porque, como en cualquier patología, el diagnóstico precoz es importante para poder controlar lo mejor posible los síntomas y evitar que la evolución sea negativa.
Desde la Sociedad Española de Oftalmología indican en este sentido que en la mayor parte de las ocasiones esta enfermedad no conlleva complicaciones, aunque sí molestias para el paciente. Sólo en algunos casos puede ser grave y favorecer la presencia de lesiones en la córnea que pueden comprometer la visión, afirma.
¿TIENE CURACIÓN?
En cuanto su tratamiento manifiesta que hay distintos, siendo lo más inmediato el uso de lágrimas artificiales, o de lubricantes oculares, aunque insiste en que todo depende del tipo de ojo seco, de las posibles causas que lo estén provocando y de la gravedad del cuadro, algo que deberá valorar el profesional.
En este sentido, el doctor Artiaga señala que se puede considerar la enfermedad de ojo seco como un proceso crónico, por lo que en la mayoría de los casos no se va a curar al 100%, aunque sí se pueden mejorar mucho los síntomas y, por tanto, la calidad de vida del paciente.