MADRID, 15 Nov. (EDIZIONES) -
¿Por qué dicen más que nunca que esta temporada de frío conviene vacunar a los niños de la gripe? ¿Por qué se está haciendo tanto hincapié desde las principales sociedades científicas de pediatría? ¿Cómo se espera que sea esta campaña?
Para poder entender todas estas cuestiones entrevistamos en Infosalus al doctor Roi Piñero, actual jefe del Servicio de Pediatría del Hospital Universitario General de Villalba (Comunidad de Madrid) y miembro de la Sociedad Española de Infectología Pediátrica y del Comité de Medicamentos de la Asociación Española de Pediatría.
Nos cuenta que es difícil saber cómo será el virus de la gripe esta temporada, "es muy difícil hacer predicciones", y recuerda por ejemplo que en la temporada anterior también se recomendó con insistencia esta inyección en los niños, y la gripe apareció afectando sobre todo a niños y a adolescentes siendo, por suerte, "bastante leve".
Ahora bien, remarca este experto que "siempre es recomendable vacunarse frente a la gripe", y todas las sociedades científicas, no solo las pediátricas, hacen hincapié en ello todos los años. De hecho, llama la atención sobre el hecho de que se está viendo esta temporada un incremento de infecciones respiratorias ya desde que se inició octubre, "por lo que todo hace pensar que este año la gripe también nos visitará".
Además, este especialista destaca que "la vacuna solo es efectiva si nos la ponemos antes de que llegue la gripe, por lo que no podemos esperar a comprobar si aparece o no para tomar la decisión; prevenir es mejor que curar, en todas las edades; no se trata de alarmar, sino de informar".
LA GRIPE SÍ ES FRECUENTE ENTRE MENORES
El pediatra de Quirónsalud subraya que la gripe es frecuente entre la población infantil; de hecho, sostiene que es la que más padece casos de gripe cada otoño-invierno, al mismo tiempo que apunta que, por rangos de edad, el mayor número de hospitalizaciones y de casos graves se producen en los mayores de 80 años, seguidos de 65-79 años, y de los menores de 4 años.
"Por tanto, sí existe riesgo de hospitalización, también en los niños. A esto hay que sumar un verdadero quebradero de cabeza para muchos pediatras: la mayoría de los niños que ingresan son niños sanos, sin patologías de base conocidas. Es decir, no podemos predecir con exactitud qué niños tienen mayor o menor riesgo de ser hospitalizados. Por este motivo, entre otros, en la actualidad el Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría recomienda la vacunación universal de todos los niños entre 6 y 59 meses (5 años), sin tener en cuenta su situación previa de salud", recalca Piñeiro.
CÓMO ES LA VACUNA DE LA GRIPE ESTA TEMPORADA
Recuerda este experto a su vez que cada año hay que vacunarse de la gripe, en primer lugar, porque la inmunidad que se genera con la vacuna no es permanente; y después porque el virus de la gripe no es único, sino que existen miles de ellos diferentes que, además, mutan todos los años.
"Cada año se analiza cuál debe ser la composición de la vacuna en función de los virus que hayan sido más prevalentes durante el invierno del hemisferio sur, por ejemplo. Es una apuesta anual. Si acertamos, la protección será mayor. Si erramos será menor, pero nunca será nula, pues siempre existe cierta protección cruzada frente a los diferentes tipos de la gripe que nos ataquen. Por ello, siempre es mejor vacunarse que no hacerlo", insiste.
Para la temporada 2022-2023 dice que se dispondrá de cuatro vacunas tetravalentes e inactivadas; es decir, de vacunas que incluyen cuatro virus diferentes de la gripe (dos de tipo A y dos de tipo B). Aquí resalta que estas inyecciones "no contienen el virus de la gripe como tal, sino pequeños trozos del mismo, que sirven para estimular al sistema inmunológico", un dato en su opinión importante para erradicar de una vez por todas ese bulo de que "la vacuna de la gripe te produce la gripe".
"Es imposible, no hay virus de la gripe por lo que la vacuna inactivada no te puede provocar la gripe. Se administran por vía intramuscular o subcutánea, es decir, con un pinchazo", agrega.
CÓMO PONÉRSELA Y CUÁNDO ES EFICAZ
Concretamente, los menores de 9 años en adelante es suficiente vacunarlos de una sola dosis; mientras que en los de 8 años a 6 meses se deben administrar dos dosis separadas por, al menos, 4 semanas, salvo que en la temporada anterior ya hubieran recibido dos dosis, en cuyo caso una sola dosis sería suficiente. "Los lactantes menores de 6 meses no pueden ser vacunados frente a la gripe", añade.
Por otro lado, cuenta que la vacuna, a las dos semanas de su inoculación, se considera que la protección es completa, lo que no quiere decir que antes de dicho tiempo no estemos protegidos en absoluto. "El momento es ahora, para estar protegidos cuanto antes. La duración de la protección depende directamente del sistema inmune de quien haya recibido la vacuna. Generalmente es superior a los cuatro meses e inferior a un año", apostilla.
NOVEDAD: LA VACUNA INTRANASAL
A su vez menciona este doctor que existe también una vacuna atenuada, tetravalente y de administración intranasal (Fluenz Tetra), dirigida a niños y adolescentes de entre 2 y 17 años.
Entre sus ventajas, defiende la forma de administración, que es más cómoda, y además simula el mecanismo de infección natural del virus, aspecto que podría ser mejor al generar mayor protección en mucosas. "Como inconveniente, aunque realmente no lo es, aquí sí estamos administrando virus vivos. No lo es porque estos virus están atenuados, es decir 'adormilados', y no tienen capacidad de generar infección, pero sí consiguen estimular al sistema inmunológico y generar la protección necesaria para estar inmunizados frente a la gripe", subraya.
En el caso de las vacunas atenuadas mantiene este pediatra que se administra solo una dosis y no están recomendadas en inmunodeprimidos, existiendo también otras contraindicaciones.
QUÉ MENORES SÍ O SÍ DEBEN PONERSE LA VACUNA
Con todo ello, el jefe del Servicio de Pediatría del Hospital Universitario General de Villalba insiste en que la vacuna de la gripe está recomendada especialmente en los menores entre 6 y 59 mes, recordando en este punto que la mayor parte de los menores que ingresan están previamente sanos.
Además, subraya que existe una larga lista de grupos de riesgo con prioridad para la vacunación que se puede consultar, por ejemplo, en la web del Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría (https://vacunasaep.org/), donde destacarían por su frecuencia los niños con asma, con diabetes, o con celiaquía.
ES UN BENEFICIO COLECTIVO
Por otro lado, y en ausencia de patologías, mantiene Piñeiro que vacunar a los niños frente a la gripe no solo supone un beneficio individual, dado que la vacunación de los niños sanos interrumpe la cadena de transmisión y protege de forma indirecta a otros miembros de la comunidad, incluidos aquellos más vulnerables como las personas mayores, las personas inmunodeprimidas y los menores de 6 meses que no pueden recibir la vacuna.
"Hay que tener en cuenta además que los niños son generalmente los principales difusores de la gripe al resto de la comunidad: tienen una carga viral en sus secreciones mucho mayor y más duradera que los adultos y, por motivos evidentes, tienen menos cuidado a la hora de controlar la tos y los estornudos", señala el miembro de la Sociedad Española de Infectología Pediátrica.
ALIVIAR LOS EFECTOS SECUNDARIOS
En último lugar, Roi Piñeiro hace referencia a los efectos secundarios que puedan surgir tras la inoculación de la vacuna, indicando que, de aparecer, son generalmente leves: "A nivel local puede aparecer dolor y enrojecimiento en el sitio de la inyección, que puede tratarse con frío local y/o analgésicos menores habituales. A nivel general, fiebre o febrícula y malestar, generalmente durante un periodo inferior a las 24-48 horas desde la vacunación, y también puede ser tratado con analgésicos menores. Otras reacciones adversas son excepcionales".
En último lugar, el también miembro de la Asociación Española de Pediatría subraya que hoy en día existe mucha información sobre las vacunas, "tal vez demasiada", lo que a su juicio puede llevar a muchas personas a lo que hoy conocemos como 'infoxicación'.
"Mi recomendación es la de siempre, fíese de lo que lea en textos oficiales, como aquellos procedentes, por ejemplo, del Ministerio de Sanidad, sociedades científicas, o el propio Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría. Escuche siempre a los profesionales sanitarios de su centro de salud. Si otorga más valor a lo que pueda leer en algunas redes sociales o en algunos servicios de mensajería instantánea es decisión suya. Pero piense, y razone, si otras decisiones importantes de su vida también las ha tomado por lo que dicen en las redes, o según la recomendación de la mayoría de los expertos", concluye el pediatra del Hospital General de Villalba.