MADRID, 23 (EDIZIONES)
Las Navidades es tiempo de reuniones familiares, de juntarnos con nuestros seres queridos y una época que aprovechamos para estar con aquellas personas con las que no estamos el resto del año y de hacer mil planes. Pero también es una época en la que mantenemos el contacto con muchísimas personas diferentes y en la que la COVID-19 ya es una más, dentro de la marabunta de enfermedades respiratorias que hay en la actualidad.
Surgen las dudas en muchos de si tenemos síntomas catarrales qué hacer. En primer lugar, de qué se trata, si de COVID-19, de gripe, o de un resfriado. Y después qué hacer, si a estas alturas de la pandemia es útil o no hacernos un test para descartar.
Es por ello por lo que entrevistamos a la portavoz de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC) y medico microbióloga del Hospital A Coruña, a la doctora María del Mar Tomás, y le preguntamos si, de cara a estas Navidades, y tal y como está el panorama en cuanto a infecciones respiratorias, saber qué hacer si tenemos síntomas catarrales, hasta qué punto nos compensa hacernos un test de descarte.
Según destaca, si tenemos síntomas catarrales lo idóneo es evitar el contacto social, tal y como hemos hecho siempre si teníamos una gripe, y especialmente si vamos a quedar con personas vulnerables, con personas mayores, si bien reconoce que ahora mismo es cierto que tenemos un panorama de subvariantes de ómicron, junto con gripe A, VRS, y otros virus, que no hemos tenido antes.
"Es decir, tenemos un montón de virus. De forma que si tenemos síntomas y si vamos a quedar con personas vulnerables hay test para COVID-19 y gripe, pero no para el resto de virus. Por tanto, podemos hacernos un test de descarte si vamos a tener contacto con personas vulnerables, en quienes pueda tener un efecto mayor la infección respiratoria. En cambio, si quedamos con gente joven o sin factor de riesgo hay que asumir que haya ciertos contagios, porque tenemos un panorama de múltiples virus, que unos se detectan con test cuando hay suficiente carga viral y otros no", subraya.
Por tanto, si hay síntomas evitar contacto social y hacernos test, llevar mascarilla, al tiempo que aconseja vacunarse de COVID y de gripe siempre porque, según insiste esta microbióloga, es la única medida que evitaría una enfermedad grave, así como la hospitalización o incluso la muerte por culpa de esta infección.
SÍNTOMAS DE LA ÚLTIMA VARIANTE DE LA COVID-19
Por otro lado, preguntada sobre cómo está la COVID-19 actualmente a nivel de contagios, la doctora Tomás resalta que a nivel de hospitalizaciones la infección por SARS-CoV-2 está más controlada, incluso puede ser que más que la gripe (sí hay vacunación), o el VRS donde no hay vacunación y está aumentando. "La COVID-19 se mantiene estable a nivel hospitalario gracias a las infecciones pasadas anteriormente y a la vacunación", remarca.
La vacunación, según prosigue, controla el incremento insostenible de infecciones a nivel hospitalario, pero hay mucha infección a nivel de atención primaria, aunque no solo de coronavirus, sino de enfermedades respiratorias: "Si no hay COVID-19, es VRS, o gripe A y, además, con su inmunidad duradera podemos pasar la infección varias veces", advierte.
Sobre los síntomas concretos de las subvariantes de ómicron ahora predominantes en nuestro país ve importante destacar que estos son muy variables, pero parece que todo indica a los comunes en una infección de tracto respiratorio superior: afonía, febrícula, malestar general, o dolor garganta.
"No es como las variantes previas a ómicron, que eran más invasivas. Por tanto, sí que parece que la vacunación ha hecho cambiar este panorama y las infecciones de COVID-19 que hay son similares a una infección de tracto respiratorio superior", precisa esta doctora del Hospital A Coruña.
SOLO TENER EN CUENTA CON RESULTADOS POSITIVOS
Ahora bien, sobre cómo distinguir la gripe de la COVID-19 o de otro virus respiratorio confiesa esta experta microbióloga que "clínicamente es imposible diferenciarlas", aunque sí hay test de autodiagnóstico para diferenciar la gripe de la infección por SARS-CoV-2.
Eso sí, destaca esta portavoz de la SEIMC que, en caso de presentar síntomas catarrales, nunca hay que fiarse de un resultado negativo, solo de los positivos: "Es importante que en un test te puedes creer los resultados positivos. Un resultado negativo no quiere decir que teniendo síntomas no tengas una infección".
Respecto a vacunación dice que se aconseja en las personas vulnerables, estas remarca que deben vacunarse; mientras sostiene que el resto debe asumir que tendrá contacto con ellas constantemente y que nuestro cuerpo reaccionará eliminándolas bien. Pero en las personas vulnerables sí reitera que se aconseja la vacunación de la gripe, pero también de la COVID-19.
No obstante, es algo opcional, según resulta, de forma que también es una forma de protegerles si nos vacunamos: "La vacunación intenta evitar también que se expanda el virus. Cuantos más vacunados, mejor. Pero la campaña de vacunación dirigida especialmente a personas vulnerables. El resto es opcional y no quiere decir que no lo hagan".
CONSEJOS DE CARA A ESTAS NAVIDADES
En resumen, la portavoz de la SEIMC aconseja si tenemos síntomas catarrales fundamentalmente el prevenir, el evitar el contacto con las personas vulnerables. Si queremos podemos hacernos un test y solo debemos creernos los resultados positivos, insiste.
"Todo es responsabilidad individual estas Navidades. Si tienes síntomas puedes llevar mascarilla, ventilar, realizar un lavado de manos frecuente, y mantener las distancias para intentar no contagiar. Todos los virus están en circulación", subraya la doctora Tomás.
Aquí recuerda que en Occidente se tomó la estrategia de vacunar y de convivir con el virus, mientras que China no, optó por no convivir con el virus, la llamada estrategia 'cero', y ahora no puede vivir siempre así y ha debido cambiar de plan. "En China ahora se van a infectar todos sin ningún tipo de inmunidad. La vía que hemos escogido nosotros nos hace vivir, tener un contacto social, y la vacunación nos ha protegido de muertes y de hospitalización", sentencia la portavoz de la SEIMC.