MADRID, 11 Jul. (EUROPA PRESS) -
Cuando los investigadores de Reino Unido expusieron a los adolescentes deprimidos a palabras felices o tristes y tomaron imágenes de sus cerebros, encontraron que la depresión tiene diferentes efectos sobre la actividad cerebral de pacientes masculinos y femeninos en ciertas regiones cerebrales. Los hallazgos sugieren que las niñas y los niños adolescentes podrían experimentar depresión de manera diferente y que los tratamientos específicos por sexo podrían resultar beneficiosos para los adolescentes.
Los hombres y las mujeres parecen sufrir depresión de manera diferente y esto es particularmente sorprendente en los adolescentes. A los 15 años de edad, las niñas tienen el doble de probabilidades de sufrir de depresión que los niños. Hay varias posibles razones para esto, como problemas de imagen corporal, fluctuaciones hormonales y factores genéticos, de forma que las niñas están más en riesgo de heredar la depresión. Sin embargo, las diferencias entre los sexos no sólo implican el riesgo de experimentar depresión, sino también cómo se manifiesta el trastorno y sus consecuencias.
"Los hombres son más propensos a sufrir de depresión persistente, mientras que en las mujeres la depresión tiende a ser más episódica
--detalla la investigadora Jie-Yu Chuang, de la Universidad de Cambridge y autora del estudio, publicado recientemente en 'Frontiers in Psychiatry'--. En comparación con las mujeres, los hombres deprimidos también son más propensos a sufrir graves consecuencias de su depresión, como el abuso de sustancias y el suicidio". A pesar de esto, hasta ahora, la mayoría de los científicos se han centrado en la depresión de las mujeres, probablemente porque es más común.
Esto motivó a Chuang ya sus colegas a llevar a cabo este último análisis para encontrar diferencias entre hombres y mujeres deprimidos. Así, reclutaron voluntarios adolescentes de entre 11 y 18 años, con 82 mujeres y 24 varones pacientes que sufrían de depresión, y 24 mujeres y 10 hombres voluntarios sanos. Los autores tomaron imágenes de los cerebros de los adolescentes usando resonancia magnética, mientras que mostraban palabras felices, tristes o neutrales en una pantalla en un orden específico.
NECESIDAD DE INTERVENCIONES TEMPRANAS EN LA ADOLESCENCIA
Los voluntarios presionaron un botón cuando aparecieron ciertos tipos de palabras y no presionaron el botón cuando aparecieron otras, y los investigadores midieron su actividad cerebral durante todo el experimento. Cuando los investigadores hicieron destellear ciertas combinaciones de palabras en la pantalla, notaron que la depresión afecta a la actividad cerebral de manera diferente entre los niños y las niñas en regiones cerebrales como el giro supramarginal y el cíngulo posterior.
"Nuestro hallazgo sugiere que, a principios de la adolescencia, la depresión podría afectar al cerebro de manera diferente entre los niños y las niñas --resume Chuang--. El tratamiento específico del sexo y las estrategias de prevención para la depresión deben considerarse temprano en la adolescencia y, con suerte, estas intervenciones tempranas podrían alterar la trayectoria de la enfermedad antes de que las cosas empeoren".
Las regiones del cerebro destacadas en el estudio han sido previamente vinculadas a la depresión, pero se necesita más trabajo para entender por qué se ven afectadas de manera diferente en los niños deprimidos, y si esto está relacionado con cómo los niños experimentan y manejan la depresión.
Debido a que la depresión es más común en las niñas, los científicos no fueron capaces de reclutar tantos niños en este estudio, por lo que los futuros experimentos deberían comparar un número similar de niñas y niños para obtener resultados más representativos. Chuang y sus colegas quieren explorar este fenómeno más lejos. "Creo que sería estupendo liderar un gran estudio longitudinal sobre las diferencias sexuales en la depresión desde la adolescencia hasta la edad adulta", concluyen.