MADRID, 19 Dic. (EUROPA PRESS) -
En la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), los pulmones de los pacientes pierden su capacidad de reparar los daños por su cuenta. Científicos del ‘Helmholtz Zentrum München’, filial del Centro Alemán de Investigación Pulmonar (DZL, por sus siglas en alemán), tienen una nueva idea de por qué sucede: es culpa de la molécula Wnt5a, como revelan en un artículo publicado en 'Journal of Experimental Medicine'.
La primera indicación de EPOC suele ser una tos crónica y, a medida que avanza la enfermedad, las vías respiratorias se estrechan y, a menudo, se desarrolla enfisema pulmonar. Esto indica una expansión irreversible y daño a los alvéolos o sacos de aire. "El cuerpo ya no es capaz de reparar las estructuras destruidas", explica la doctora Melanie Königshoff, responsable de la Unidad de Investigación de Reparación y Regeneración Pulmonar (LRR, por sus siglas en inglés) del Centro Integral de Neumología (CPC, por sus siglas en inglés) del ‘Helmholtz Zentrum München’.
Esta experta y su equipo trabajaron para entender cómo sucede esto. "En nuestro trabajo actual hemos podido demostrar que la EPOC resulta por un cambio en los mensajeros que usan las células pulmonares para comunicarse unas con otras", subraya Königshoff. Específicamente, los científicos descubrieron una mayor producción de la molécula Wnt5a, que interrumpe la vía de señalización Wnt/beta-catenina clásica (o canónica, como la llaman los expertos), que es responsable de estas reparaciones.
"Nuestra hipótesis de trabajo fue que la relación entre los diferentes mensajeros Wnt ya no es equilibrada en la EPOC", resume el primer autor del estudio, Hoeke Baarsma, científico en LRR. El equipo buscó posibles señales de interferencia. "Tanto en el modelo preclínico como en las muestras de tejidos de pacientes, encontramos que en el tejido de la EPOC particularmente la molécula no canónica Wnt5a se incrementa y se presenta de forma modificada".
EL HUMO DEL TABACO AGRAVA LA SITUACIÓN
Según los autores, los estímulos que típicamente causan una reacción en la EPOC, como el humo del cigarrillo, además, conducen a una mayor producción de Wnt5a y, en consecuencia, a una regeneración pulmonar deteriorada. En el siguiente paso, los investigadores fueron capaces de mostrar dónde se origina la señal mal dirigida.
"Es producida por ciertas células en el tejido conectivo, los llamados fibroblastos", describe Baarsma. Cuando trataron células epiteliales pulmonares con Wnt5a derivada de los fibroblastos, las células perdieron su capacidad de curación. Además, los científicos emplearon anticuerpos dirigidos contra Wnt5a en dos modelos experimentales diferentes para retrasar la destrucción de pulmón y mantener mejor la función pulmonar.
"Nuestros resultados demuestran que la clásica cascada de señales Wnt/beta-catenina se ve interrumpida por el ligando Wnt5a, un mecanismo completamente nuevo asociado con la EPOC y que podría llevar a nuevos enfoques terapéuticos, que son urgentemente necesarios para el tratamiento", afirma el líder del estudio Königshoff para explicar la relevancia de los hallazgos.
La vía de señalización Wnt es una de las muchas vías que envía señales con el fin de permitir que las células respondan a los cambios externos. La vía de señalización lleva el nombre de su principal jugador "Wnt", una proteína de señalización que asume una función clave como mediador local en el desarrollo de varias células.
Numerosas proteínas están implicadas en el reenvío canónico (clásico) de las señales, incluyendo beta-catenina como mensajero celular central. Una vía en la que Wnt actúa a través de otros mensajeros, como se describe aquí, se denomina una vía de señalización no canónica. Esto puede tener un impacto negativo en la señalización canónica.