MADRID, 30 Jun. (EDIZIONES) -
Las vacaciones son un periodo muy deseado por todos. Nos sirven de descanso y de desconexión. Si además estamos inmersos en un proceso oncológico necesitamos aún más esa desconexión y unos días de descanso entre tratamientos.
Carmen Vázquez es directora de Enfermería de MD Anderson Cancer Center Madrid y subraya en una entrevista con Infosalus que, en este sentido, los oncólogos, y siempre que no haya contraindicación, mueven fechas, adelantando o atrasando los tratamientos para que los pacientes puedan disfrutar de unas más que merecidas vacaciones.
Aquí, esta enfermera precisa que si se está recibiendo un tratamiento intravenoso lo normal es disfrutar las vacaciones entre 2 ciclos, alargando el periodo unos días. Eso sí, reconoce que esto se puede complicar en aquellos pacientes con tratamientos donde se reciben ciclos o sesiones semanales.
"Aún así, en estos casos, el oncólogo siempre intentará ampliar los días de descanso para que los pacientes puedan disfrutar de unas mini vacaciones. Si el tratamiento es oral, todo es mucho más fácil y solo hay que estar seguro de disponer de todo el tratamiento, o del número de pastillas que vamos a necesitar durante las vacaciones", agrega la especialista de MD Anderson Cancer Center.
CONSEJOS PARA LAS PERSONAS EN TRATAMIENTO ONCOLÓGICO
Así con todo, Vázquez recomienda a los pacientes en tratamiento oncológico no tomar el sol y, aunque no se tome el sol directamente, por el mero hecho de salir a la calle hay que proteger la piel expuesta con productos que tengan un factor de protección solar muy alto, correspondiente con el número 50.
"La quimioterapia puede provocar fotosensibilidad y los tratamientos pueden producir síntomas como sequedad, enrojecimiento, descamación, incluso aparición de manchas en la piel. También para pacientes que han o están recibiendo radioterapia, esta aumenta mucho el riesgo de quemadura solar en el área tratada", advierte la enfermera.
Sí insiste en que el sol es necesario para la absorción de vitamina D, pero basta con estar 10 minutos al sol, siempre muy a primera hora de la mañana o a última hora de la tarde, evitando las horas centrales del día. "Hay que recalcar e insistir en la necesidad de aplicar un protector solar 50 FPS, aunque no estemos directamente expuestos al sol, ya que debajo de una sombrilla o en días nublados también podemos quemarnos", agrega.
En última instancia, Carmen Vázquez es directora de Enfermería de MD Anderson Cancer Center Madrid mantiene que, en general, durante las vacaciones los cuidados de los pacientes deben ser los mismos: descansar, una buena nutrición e ingesta de agua; así como cuidados de la piel y del cabello; buscar momentos para relajarse y disfrutar como a cada uno le guste.
"Es buena idea evitar destinos vacacionales donde no podamos participar del día a día de las personas que nos acompañan, donde seamos incapaces de seguir su ritmo y solo podemos sentir que les estamos fastidiando las vacaciones. Es preferible elegir lugares tranquilos, en la naturaleza, donde no estemos expuestos a 'tentaciones' o ritmos frenéticos de actividades veraniegas", sentencia esta enfermera.
