MADRID, 17 Abr. (Reuters/EP) -
Investigadores del Centro Médico Cedars-Sinai en Los Ángeles (Estados Unidos) han constatado un aumento de casos de dolor de cuello y parte superior de la espalda que podría estar relacionado con malas posturas al usar los teléfonos móviles y mirar hacia abajo a los 'smartphones' de forma prolongada.
En algunos pacientes, especialmente jóvenes que por su edad aún no deberían sufrir problemas de este tipo, se están reportando incluso hernias discales y problemas de alineación de su columna, según los resultados publicados en la revista 'The Spine Journal'.
"En una radiografía el cuello suele curvarse hacia atrás pero lo que estamos viendo es que la curva se está invirtiendo porque las personas miran sus teléfonos durante horas a diario", según Todd Lanman, uno de los neurocirujanos que ha dirigido la investigación.
De hecho, este experto reconoce que cuando los pacientes llegan a su consulta "suelen presentar mucho dolor y sufren problemas en los discos", preocupado por el alcance que podría tener este impacto en los niños que ya usan los teléfonos tanto tiempo y desde tan pequeños.
Los autores del trabajo describen cómo los usuarios de 'smartphones' suelen mirar hacia abajo mientras leen los mensajes recibidos, navegan o ven videos. De hecho, estiman que la inclinación del cuello es de unos 45 grados pero puede ser incluso más en función de si están sentados o de pié.
LA CABEZA PESA MÁS CUANTO MÁS SE INCLINA
El impacto para la columna vertebral es mayor cuanto más flexionado está el cuello. Si la cabeza suele pesar entre 10 y 12 libras (entre 4,5 y 5,4 kilos) cuando el cuello permanece erguido, si se flexiona unos 15 grados equivaldría a un peso de 27 libras (unos 12 kilos). En lo que respecta a la espina dorsal, la tensión que acumula aumenta por cada grado de flexión por lo que 60 grados equivaldrían a 60 libras (unos 27,2 kilos).
En virtud de esta proporción, un niño de 8 años necesitaría ser operado al cumplir los 28, según se pregunta Lanman, que teme que este deterioro pueda afectar también a su desarrollo.
Para combatir este problema, los expertos sugieren cambios sencillos como subir los teléfonos móviles para no tener que agachar la vista mientras uno lee mensajes, o usar las dos manos y los dos pulgares para escribir y conseguir una postura más simétrica y cómoda para la columna.
Y más allá de los móviles, también proponen utilizar soportes a la hora de usar portátiles o tabletas para que quede a la altura de los ojos y conseguir una buena posición ergonómica.
"Es difícil recomendar una postura adecuada para los usuarios de teléfonos inteligentes. Pero si subimos el teléfono a nivel de los ojos para evitar mirar hacia abajo podríamos encontrarnos con un problema adicional en los brazos, que también sufrirían malas posturas", según ha añadido Gwanseob Shin, del Instituto Nacional de Ergonomía de Ulsan (Corea del Sur), que no participó en el estudio.
Por ello, este experto apuesta por realizar descansos de forma regular y realizar ciertos estiramientos o ejercicios básicos para fortalecer los músculos de cuello y hombros.