MADRID, 24 Oct. (EUROPA PRESS) -
En España se diagnostican cada día 5 nuevos casos de síndrome mielodisplásico, lo que implica que cada año 2.000 personas se ven afectadas por este tipo de cáncer de la sangre, difícilmente curable, y cuya incidencia aumenta con la edad, siendo la media de edad de aparición de 70 años, según señalan desde la Fundación Josep Carreras, con motivo del Día Mundial de los Síndromes Mielodisplásicos, que se celebra este martes.
Los síndromes mielodisplásicos son un grupo de cánceres de la sangre que tienen como característica común que las células madre de la médula ósea, encargadas de fabricar todas las células de la sangre, tienen un defecto que les hace producir células anómalas, incapaces de realizar sus funciones habituales, y en menor cantidad de lo normal.
Desde la fundación recuerdan que de cara al futuro el trabajo de los investigadores está enfocado a conseguir más opciones de tratamiento y más efectivos para los pacientes con la enfermedad en curso agresivo.
Aunque en algunos casos no se requiere ningún tratamiento quimioterápico, en un 30 por ciento de los pacientes el curso de la enfermedad es muy agresivo. Y los tratamientos actuales de los que se dispone son pocos y con baja efectividad para conseguir la curación de la enfermedad.
Precisamente, el equipo deldoctor Francesc Solé, director científico del Campus ICOGermansTrias i Pujol del Instituto de Investigación contra la Leucemia Josep Carreras yvicepresidente del Grupo Español de Síndromes Mielodisplásicos, investiga exclusivamente este grupo de enfermedades para ofrecernuevas oportunidades a los pacientes.
Por otro lado, es fundamental conocer mejor el origen y las causas que provocan esta enfermedad, saber por qué unos pacientes presentan un curso muy rápido y otros más lento, y poder encontrar el medicamento adecuado para cada tipo de paciente.
"La investigación nos tiene que dar la llave para curar a más enfermos afectos de síndrome mielodisplásico. Las estadísticas 'dicen' que se curan los mismos pacientes ahora que hace 10 años. Debemos concentrar esfuerzos en una investigación que permita mejorar esta estadística", afirma el doctor Solé.
A pesar de ello, añade, "los síndrome mielodisplásico cada vez se conocen mejor y, gracias a ello, estamos muy cerca de diseñar nuevos medicamentos que permitirán curar a más pacientes".
PACIENTES CON ANEMIA SIDEROBLÁSTICA.
Finalmente, los investigadores están tratando de entender qué papel juega el hierro en algunos síndromes mielodisplásicos, ya que existe un subgrupo de pacientes con síndromes mielodisplásicos que tienen una condición llamada anemia sideroblástica.
A estos pacientes se les acumulan grandes cantidades de hierro en las células. En la mayoría de estos pacientes se puede identificar una mutación genética aunque se desconoce el mecanismo exacto de cómo se acumula el hierro en las células. Estos pacientes con anemia sideroblástica no suelen llegar a desarrollar una leucemia aguda pero sufren de anemia crónica y daño celular por la sobrecarga de hierro.
"Con nuestras investigaciones pretendemos avanzar para minimizar el daño creado por la sobrecarga de hierro en estos pacientes y conocer más a fondo los mecanismos moleculares que llevan a la anemia sideroblástica en pacientes con SMD", explica la doctora Mayka Sánchez, quien lidera uno de los equipos del Instituto de Investigación contra la leucemia Josep Carreras para investigar esta enfermedad.