MADRID 22 Oct. (EUROPA PRESS) -
Un dispositivo que proporciona estimulación directa al cerebro ha resultado ser un medio seguro y eficaz para tratar la depresión en el hogar, según un nuevo estudio realizado por investigadores de UTHealth Houston (Estados Unidos), el Instituto de Psiquiatría, Psicología y Neurociencia del King's College de Londres y la Universidad de East London (ambas en Reino Unido).
La estimulación transcraneal con corriente continua (tDCS) es una forma de estimulación cerebral no invasiva que aplica una corriente continua débil de entre 0,5 y 2 miliamperios en el cuero cabelludo a través de dos electrodos. Ya se utiliza habitualmente en clínicas para tratar afecciones como la psicosis y los trastornos alimentarios. El ensayo clínico evaluó la tDCS que se utilizó en un entorno doméstico y que los pacientes se autoadministraron.
"Los resultados de este estudio, que probó la tDCS en el hogar, pueden representar un avance importante en el campo de los trastornos del estado de ánimo para mejorar la viabilidad y la respuesta terapéutica con esta nueva modalidad de neuromodulación", cuenta Rodrigo Machado-Vieira, de la Facultad de Medicina McGovern de UTHealth Houston (Estados Unidos).
"Estos últimos resultados confirmaron un perfil positivo de seguridad y eficacia similar al de los estudios iniciales con pacientes con depresión y trastorno bipolar, y la terapia en el hogar puede facilitar el acceso a este tratamiento a un mayor número de pacientes".
El estudio, publicado en 'Nature Medicine', incluyó a 174 participantes adultos con diagnóstico de depresión grave a moderada. Se les asignó aleatoriamente a uno de dos grupos de tratamiento: tDCS activa o tDCS inactiva, que utilizaba el mismo dispositivo pero no proporcionaba corriente. Los participantes recibieron un tratamiento de 10 semanas, con cinco sesiones de 30 minutos a la semana durante las primeras tres semanas, seguidas de tres sesiones de 30 minutos a la semana durante las siguientes siete semanas.
Los investigadores descubrieron que los participantes del grupo activo del ensayo mostraron mejoras significativas en la gravedad de su depresión, así como una respuesta clínica general y una remisión, en comparación con los del grupo de control con placebo inactivo. Las tasas de respuesta al tratamiento y remisión fueron tres veces más altas en el grupo de tratamiento activo en comparación con el grupo placebo, con un 44,9% en el grupo activo que demostró una tasa de remisión en comparación con el 21,8% del grupo de control.
"La depresión afecta sobre todo a los 280 millones de personas que actualmente padecen síntomas en todo el mundo. Si bien una combinación de antidepresivos y terapia suele resultar eficaz para muchas personas, la medicación puede tener efectos secundarios que pueden resultar molestos para algunas personas. Nuestro estudio ha demostrado que la tDCS es una posible opción de primera línea que podría ayudar a quienes la necesitan", expone Cynthia Fu autora principal del estudio y profesora de neurociencia afectiva y psicoterapia en el King's College de Londres .
"No existe una intervención médica perfecta. Los medicamentos pueden tener efectos secundarios no deseados, mientras que la terapia requiere mucho tiempo y recursos. Nuestra esperanza es que la tDCS pueda proporcionar una tercera alternativa viable para las personas con depresión moderada a severa para ayudarlas a controlar mejor sus síntomas", añade Rachel Woodham, primera autora del estudio y asistente de investigación en la Universidad de East London.