Un estudio concluye que los anticuerpos maternos interfieren en la vacuna de la malaria en bebés
La eficacia de la vacuna disminuya ante un mayor número de anticuerpos maternos transmitidos
BARCELONA, 24 Oct. (EUROPA PRESS) -
Un estudio liderado por el Instituto de Salud Global (ISGlobal) de Barcelona, centro impulsado por la Fundación La Caixa, ha comprobado que los anticuerpos maternos interfieren en la respuesta a la vacuna contra la malaria en bebés, informa este jueves en un comunicado.
La investigación, publicada en la 'The Lancet Infectious Diseases', sugiere que los anticuerpos maternos que atraviesan la placenta contribuyen a una "menor eficacia" de la vacuna contra la malaria en bebés menores de 5 meses.
Se trata del "primer" estudio que examina el efecto combinado de la edad, la exposición previa individual y los niveles basales de anticuerpos específicos, ya sea transferidos pasivamente de la madre al feto o adquiridos activamente por el bebé al contraer la enfermedad.
7 CENTROS AFRICANOS
Han colaborado en el estudio 7 centros de África, continente donde se han desplegados las dos "primeras" vacunas contra la malaria: Cism-Mozambique, IHI-Tanzania, Crun-Burkina Faso, KHRC-Ghana, Nnimr-Ghana, Cermel-Gabón, Kemri-Kenia).
El despliegue de las vacunas --RTS,S/AS01E y R21/Matrix-M--, que están recomendadas a niños mayores de 5 meses en el momento de recibir la primera dosis, pretende proteger a la población infantil contra la malaria causada por el parásito Plasmodium falciparum.
Los investigadores han analizado muestras de sangre de más de 600 bebés (entre 5 y 12 semanas de edad y entre 5 y 17 meses), que participaron en el ensayo clínico de fase 3 de la vacuna RTS,S/AS01E.
Para ello, han utilizado la tecnología de microarrays de proteínas para medir los anticuerpos frente a 1.000 antígenos del Plasmodium falciparum antes de la vacunación para determinar si la exposición previa a la malaria y la edad influían en la respuesta a la vacuna.
El investigador Didac Macià ha explicado que el uso de microarrays "permitió medir con precisión la exposición a la malaria a nivel individual", incluyendo la exposición materna en el caso de bebés menores de 12 semanas y las infecciones pasadas en bebés mayores de 5 meses.
RESULTADOS
Los investigadores han detectado que los anticuerpos maternos anti-CSP disminuyen entre los primeros 3 y 6 meses de vida y pueden interferir en la eficacia de la vacuna, y han observado que, cuánto mayor es el nivel de transmisión de la malaria, más anticuerpos maternos se transmiten al bebé disminuyendo la eficacia de la vacuna.
El estudio concluye que los bebés de menos de 5 meses pueden beneficiarse de la vacunación contra la malaria en áreas de baja transmisión de la enfermedad, donde las madres tienen menos anticuerpos, y también durante brotes en regiones sin malaria y en poblaciones migrando hacia una zona de alta transmisión.
La investigadora de ISGlobal Gemma Moncunill ha afirmado que los resultados destacan "la necesidad de considerar el momento y los niveles de anticuerpos maternos contra la malaria para mejorar la eficacia de la vacuna en los bebés más pequeños y vulnerables".
El estudio ha contado con financiación del National Institute of Allergy and Infectious Diseases, que forma parte del National Institutes of Health de Estados Unidos.