CERDANYOLA DEL VALLÈS (BARCELONA), 28 (EUROPA PRESS)
Un estudio del Instituto de Neurociencias de la Universitat Autònoma de Barcelona (INc-UAB) y del Centro de Investigación Biomédica en Red Enfermedades Cardiovaculares (Cibercv) ha comprobado que la interrupción temporal del flujo sanguíneo del cerebro en ratas hipertensas puede provocar cambios duraderos en las arterias pequeñas de su abdomen.
Para la investigación, publicada en la revista 'Life Sciences', el equipo ha inducido isquemias cerebrales transitorias a ratas con hipertensión, primera causa de riesgo de ictus, y ha estudiado cómo afecta a la función y estructura de las arterias que irrigan los intestinos, según informa la UAB en un comunicado.
Los resultados demuestran que el episodio isquémico altera la capacidad contráctil de las arterias y que, ocho días más tarde, este efecto persiste; además, también se observó un engrosamiento de las paredes y un aumento del tamaño de las arterias.
La investigación aporta así "nuevos conocimientos" sobre cómo la interrupción temporal del flujo sanguíneo del cerebro puede afectar los vasos sanguíneos fuera del sistema nervioso central, particularmente en casos de hipertensión.
Además, el estudio ha puesto de relieve el "potencial" del medicamento usado para restaurar el flujo sanguíneo de las ratas, ácido hidroxámico suberoilanilida (Saha), como protector cerebral después de un ictus.