MADRID, 7 Jul. (EUROPA PRESS) -
La jefa de la Unidad de Mama del Servicio de Oncología del Hospital Vall d'Hebron, la doctora Cristina Saura, ha destacado los "enormes beneficios" de participar en ensayos clínicos para las pacientes con cáncer de mama, ya que de este modo "tienen la posibilidad de recibir fármacos aún no aprobados en España, pero que desde la comunidad científica ya sabemos que pueden beneficiarlas, así como la contribución que supone para avanzar en el conocimiento científico y para conseguir la aprobación de nuevos fármacos".
Según ha manifestado la doctora, que además es miembro de la Junta Directiva de SOLTI, hay un porcentaje importante de pacientes que no tiene claros determinados conceptos y tiene dudas o ideas preconcebidas que frenan la participación en este tipo de investigaciones, que permiten evaluar nuevos medicamentos y nuevos procedimientos que pueden aportar un mayor valor al tratamiento y pronóstico del cáncer de mama.
Bajo este contexto, la Fundación SOLTI ha organizado en Barcelona el 'Taller de formación sobre ensayos clínicos para pacientes con cáncer de mama', que ha contado con el aval de la Federación de Mujeres con Cáncer de Mama (FECMA) y la colaboración de Novartis y Pfizer.
La doctora Saura afirma que estas jornadas de formación son beneficiosas porque en ellas las pacientes pueden plantear dudas y aclarar conceptos abiertamente. "El objetivo de este taller es ser un espacio de interacción abierto donde se pueda hablar de cualquier tema relacionado con investigación clínica y cáncer de mama", ha afirmado.
A su vez, Bea Flores, una paciente que ha participado en el taller compartiendo su experiencia como participante en un ensayo clínico, ha asegurado que "asistir a un taller de estas características permite tener una visión clara de qué son los ensayos clínicos y desterrar los posibles prejuicios que se puedan tener".
"La paciente, con esta información, y con el pleno conocimiento de en qué situación se encuentra su estado de salud, puede valorar la posibilidad de participar en un ensayo -obviamente si su oncólogo/a se lo ha propuesto-. Opino que jamás hay que tener miedo ante lo desconocido, hay que tener miedo a no intentarlo", ha subrayado.
De hecho, según han demostrado diversos estudios, entre los posibles beneficios de formar parte de un ensayo clínico una parte importante de las pacientes participantes percibe haber recibido un mayor seguimiento médico mientras formaba parte del estudio.
Por su parte, la doctora Judith Balmaña, miembro de SOLTI y jefa de la Unidad de Alto riesgo y prevención del cáncer del Servicio de Oncología del Hospital Vall d'Hebron, ha destacado las principales ventajas de las pacientes bien formadas e informadas es que al ser conocedoras de su enfermedad y pacientes autónomas pueden tomar las mejores decisiones relacionadas con su salud y sus opciones de tratamiento.
"Actualmente, hay medios informativos a doquier y lo importante es ir a las fuentes adecuadas, aquellas que aporten la información con el grado de evidencia que las avale. Ello permite entender mejor la situación de la enfermedad y conversar sobre las opciones terapéuticas entendiendo la perspectiva del paciente", ha mencionado la experta.