PAMPLONA, 11 Dic. (EUROPA PRESS) -
La responsable de la Unidad de Podología en el Hospital San Juan de Dios, Ana Sans, ha recordado que "el esquí y las condiciones que rodean la práctica de este deporte, requieren una preparación previa y una adaptación que el esquiador debe tener en cuenta, incluso, antes de acudir a las pistas".
La especialista ha explicado que el pie actuará como "la base de nuestro cuerpo" en el momento del ejercicio físico y "soporta nuestro peso y la fuerza que genera el movimiento", por lo que ha destacado que "tratar el pie adecuadamente ayudará a evitar problemas, heridas o dolor".
En un comunicado, Sans ha enumerado una serie de consejos a tener en cuenta de cara al inicio de la temporada de esquí. Por un lado, ha resaltado que la primera decisión es la elección de la bota de esquí que "son la fijación de nuestro cuerpo con los esquís por lo que deben de sujetar a la perfección con el fin de evitar posibles lesiones". Además, ha recordado que la talla de las botas de esquí "no se corresponden con la del calzado habitual".
En este sentido, ha indicado que la elección de la bota "requiere tener presente el nivel de esquí que se tenga, la talla y la horma del pie". Asimismo, ha apuntado que "las botas deben adaptarse a la forma de nuestro pie y a los cambios de volumen que sufren los pies como consecuencia de la temperatura" por lo que recomienda "reabrocharlas cada poco tiempo".
Otro de los consejos hace referencia a "la necesidad de apretar los ganchos para que no queden sueltos y flexionar varias veces las rodillas hacia adelante para ver si la bota se dobla o no". "Si la flexión es buena, tiene que poder imaginar una línea vertical desde la punta de los dedos de los pies hasta las rodillas", ha explicado.
En el caso de usar plantillas, Sans recomienda llevarlas también para la práctica del esquí. Igualmente, ha subrayado que "evitar la entrada de humedad resulta esencial" y ha aconsejado el uso de calcetines térmicos "que mantengan el calor pero que faciliten la transpiración".
HERIDAS MÁS HABITUALES
La especialista en Podología y Tratamiento del Pie en el Hospital San Juan de Dios ha explicado que las heridas habituales que puede presentar el pie del esquiador "se relacionan con la postura".
"La posición básica para esquiar consiste en flexionar parcialmente los tobillos y los esquiadores que fuercen o no estén acostumbrados a tal posición, pueden presentar heridas en los tobillos después de practicar esquí. También son habituales ampollas y rozaduras en zonas de presión con la bota, sobretodo en la zona del contrafuerte o talón", ha enumerado.
Para mejorar la prevención de este tipo de molestias, Ana Sans recomienda "mantener una hidratación correcta del pie". "Una piel cuidada e hidratada siempre va a tener una elasticidad mayor y una resistencia superior", ha destacado la podóloga que ha llamado a "incorporar esta rutina a la jornada del esquiador".
"Preparar el pie anticipadamente, eliminando durezas, procurando un corte adecuado de las uñas y corrigiendo posibles defectos previos, hará de la practica del deporte una expeciencia más gratificante y saludable", ha concluido.