MADRID, 12 Sep. (EDIZIONES) -
Una de las mayores preocupaciones de los neurólogos hoy en día es la infrautilización del tratamiento preventivo en el caso de los pacientes migrañosos. Se estima que menos del 15% de los que deberían estar tomando preventivos se les está prescribiendo. Esto condiciona que haya muchos pacientes que padezcan cefaleas con más frecuencia de la que deberían porque no reciben un tratamiento eficaz.
Así lo denuncia el doctor Pablo Irimia, neurólogo de la Clínica Universidad de Navarra, coordinador del Grupo de Estudio de Cefaleas de la Sociedad Española de Neurología (GECSEN) durante una entrevista con Infosalus con motivo de la celebración del día Internacional de la Migraña este lunes, 12 de septiembre.
Recuerda este especialista que la migraña es un tipo de dolor de cabeza muy frecuente, que afecta al 12% de la población española, y que se caracteriza por la aparición de crisis repetidas de cefalea, con unas características muy bien definidas.
"Las crisis de dolor duran entre 4 y 72 horas. El dolor es de localización hemicráneal, es decir, la cefalea predomina en un lado de la cabeza, y se describe como un latido o pulsación. La migraña puede acompañarse de náuseas, vómitos, e hipersensibilidad a la luz y al ruido", describe este experto.
Además, destaca que es característico que el dolor de cabeza empeore con la actividad física de rutina (caminar, subir escaleras), y por este motivo la mayor parte de los pacientes con migraña que tienen crisis intensas tienen que acostarse y no pueden continuar con sus actividades.
En estos casos, señala que el dolor es "muy incapacitante" e impide al paciente realizar con normalidad sus actividades familiares, sociales, laborales o de ocio: "Aproximadamente un 30% de los pacientes con migraña tiene aura, acompañando a la cefalea; una alteración que consiste en pérdida de visión, hormigueos, o problemas para hablar que duran menos de 1 hora, y que habitualmente preceden a la aparición del dolor".
A juicio del doctor Irimia, los pacientes con migraña deberían realizar una consulta médica para establecer el diagnóstico y elegir el tratamiento más adecuado a sus necesidades: "Los pacientes con cefaleas intensas e incapacitantes podrían beneficiarse del inicio de medicaciones que controlen mejor sus episodios de dolor y que reducen la frecuencia de los mismos".
Porque, según defiende, aunque la migraña no se cura, con los tratamientos disponibles en la actualidad se pueden controlar mucho mejor las crisis y también reducir su frecuencia e intensidad; "lo que mejora enormemente la calidad de vida de las personas"
¿CÓMO SE PUEDE TRATAR?
Concretamente, el coordinador del Grupo de Estudio de Cefaleas de la Sociedad Española de Neurología detalla que el tratamiento de la migraña tiene tres partes bien diferenciadas.
1. Las personas con migraña tienen que identificar y evitar aquellos posibles desencadenantes de su dolor de cabeza.
2. Todos los pacientes deben recibir tratamiento para las crisis de dolor. Cuando el dolor de cabeza es de intensidad leve se recomienda el uso de antiinflamatorios, pero cuando la cefalea es de intensidad moderada o severa el tratamiento más adecuado es el uso de triptanes, fármacos diseñados específicamente para la migraña y que mejoran a la mayoría de los pacientes.
3. En los pacientes con crisis de migraña frecuentes e incapacitantes se recomienda utilizar tratamiento preventivo: consiste en la toma de fármacos por vía oral, la inyección de toxina botulínica (para pacientes con migrañas muy frecuentes) o de anticuerpos monoclonales frente al péptido regulador del gen de la calcitonina (CGRP).
LOS PREVENTIVOS, UNA ESTRATEGIA CLAVE DEL TRATAMIENTO
El tratamiento preventivo, según indica este neurólogo, debe tomarse durante períodos prolongados de tiempo (en general unos 6 meses), y después de varias semanas de tratamiento consiguen reducir la frecuencia e intensidad de los episodios. "El tratamiento preventivo no se prescribe a todos los pacientes y se reserva para aquellas personas que tienen al menos tres crisis de migraña al mes, que le resultan incapacitante", defiende.
Valora este experto de Clínica Universidad de Navarra también que el tratamiento preventivo consigue reducir la frecuencia de los episodios de migraña, su intensidad y también disminuye la necesidad de tomar analgésicos: "En los pacientes con migrañas frecuentes es una de las estrategias clave de tratamiento".
FALTA DE ADHERENCIA A LOS TRATAMIENTOS PREVENTIVOS: ¿POR QUÉ?
Precisamente, el doctor Irimia ha liderado el estudio 'Persistencia, uso de recursos y costes en pacientes en tratamiento preventivo de la migraña: el estudio PERSEC', publicado en la revista científica 'The Journal of Headache and Pain', en el que ha participado Lilly, y que pone de relieve que un 32,4% de pacientes se adhieren los primeros 6 meses a los tratamientos preventivos y después los dejan, al tiempo que un 30,4% lo hace durante 12 meses, para después también dejarlos.
Este doctor justifica estos resultados en que en la mayoría de los casos el abandono del tratamiento preventivo se debe a la falta de eficacia y a los efectos secundarios de los fármacos orales: "Por este motivo se necesitan nuevas medicaciones preventivas para la migraña con mayor eficacia, y con una menor tasa de efectos adversos".
EL 'PODER' DE LOS ANTICUERPOS MONOCLONALES
Dice que, recientemente, se han comercializado un grupo de fármacos denominados anticuerpos monoclonales frente al péptido regulador del gen de la calcitonina (o CGRP), con "una eficacia superior a los preventivos orales y muy pocos efectos adversos", lo que en su opinión podría permitir al paciente el poder mantener el tratamiento preventivo durante el tiempo necesario.
Es más, el neurólogo resalta que la ventaja de los anticuerpos monoclonales es que son fármacos diseñados específicamente para la migraña, son "muy eficaces", pero subraya que, sobre todo, son "muy bien tolerados" por los pacientes. Además, resalta que se utilizan de una forma "muy sencilla" para el paciente, a través de una inyección que se aplica con una periodicidad mensual
Eso sí, lamenta que hoy en día los anticuerpos monoclonales frente al CGRP tienen un coste más elevado que los preventivos orales, siendo este el motivo por el que su prescripción hoy en día tiene ciertas limitaciones: "En España se pueden prescribir anticuerpos monoclonales en pacientes que tienen más de 8 crisis de migraña al mes y en los cuales han fallado 3 de los fármacos preventivos previos (orales o toxina botulínica)".
Por otro lado, el experto de la Sociedad Española de Neurología (SEN) pone de relieve que se ha observado que el acceso a los anticuerpos monoclonales frente al CGRP es diferente dependiendo de la comunidad autónoma donde viva el paciente: "Existe una norma general que define muy bien aquellas situaciones en las que los pacientes con migraña que no responden a otros tratamientos deben ser tratados con anticuerpos monoclonales. Sin embargo, el acceso a estos tratamientos resulta difícil y hay una gran desigualdad entre las diferentes comunidades autónomas".
Por este motivo, recuerda que desde la SEN y la Asociación Española de Migraña y Cefalea (AEMICE) se está promoviendo la creación de un plan estratégico nacional de atención a la migraña, que permita aumentar la visibilidad de la enfermedad, mejorar la formación de los médicos, y disminuir el retraso en el diagnóstico de la migraña, así como facilitar el acceso a los tratamientos para que los pacientes que los necesitan puedan acceder a ellos de forma rápida, de forma que esto no dependa de la comunidad autónoma donde vivan.
UN NUEVO PARADIGMA PARA EL TRATAMIENTO DE MIGRAÑAS
Ahora bien, el doctor Irimia celebra que el paradigma del tratamiento preventivo de la migraña ha cambiado "significativamente" en los últimos años, en primer lugar porque se dispone, por primera vez, de un tratamiento preventivo que ha sido diseñado específicamente para la migraña.
Después, recuerda el descubrimiento del papel clave del péptido regulador del gen de la calcitonina en la migraña, algo que según resalta, va a permitir que en los próximos años se comercialicen más fármacos que actúen sobre estas vías, lo que en última instancia igualmente beneficiará a los pacientes con migraña.