MADRID 3 Ago. (EUROPA PRESS) -
Los esteroides que se ofrecen habitualmente a las embarazadas con mayor riesgo de parto prematuro pueden ser innecesarios y provocar problemas de salud a largo plazo en los bebés, según una nueva investigación dirigida por la Universidad McMaster, en Canadá, publicada en la revista 'The BMJ'.
La investigación analizó los datos de 1,6 millones de bebés y descubrió que aproximadamente el 40% de los bebés con exposición precoz a corticosteroides --definida como la exposición a las 34 semanas de gestación o antes-- nacieron a término.
Según los investigadores, los niños nacidos a término presentaban un mayor riesgo de problemas de salud a corto y largo plazo, como ingreso en cuidados intensivos neonatales, problemas respiratorios y de crecimiento, y resultados adversos en el desarrollo neurológico.
Los corticosteroides se utilizan para aumentar las tasas de supervivencia de los recién nacidos muy prematuros y reducir los problemas de salud, pero no se conocen bien los efectos sobre la salud a largo plazo del bebé, sobre todo en los que superan las expectativas y nacen a término.
La investigación sugiere que muchos bebés expuestos a corticoides evitan el nacimiento prematuro, pero se introducen nuevos riesgos de otras complicaciones de salud futuras.
"El parto prematuro es muy difícil de predecir; necesitamos mejores modelos de predicción para evitar la sobreexposición a intervenciones como los esteroides, ya que puede existir un riesgo potencial", indica Sarah McDonald, autora principal del estudio y profesora del Departamento de Obstetricia y Ginecología de la Universidad McMaster.
Para realizar el estudio, los investigadores llevaron a cabo una revisión sistemática y un metaanálisis de los datos de siete ensayos controlados aleatorizados y 10 estudios poblacionales en los que participaron 1,6 millones de lactantes nacidos desde el año 2000.
Más de la mitad de los lactantes con exposición precoz a los corticosteroides nacieron a término (37 semanas o más) y prematuros tardíos (34-36 semanas) combinados, y los investigadores hallaron resultados similares entre este grupo combinado.
En el caso de los recién nacidos muy prematuros, los corticoides prenatales pueden salvar vidas y reducir la morbilidad grave, pero a medida que el embarazo avanza hacia el término, los beneficios se convierten en riesgos.
"Los corticoides prenatales son un arma de doble filo: muy beneficiosos para los bebés nacidos muy pronto y potencialmente perjudiciales para los nacidos a término", afirma McDonald, titular de la Cátedra de Investigación de Canadá sobre Prevención e Intervención en Enfermedades Maternoinfantiles.
Los autores afirman que es fundamental realizar más investigaciones con un seguimiento a largo plazo en ensayos controlados aleatorizados. También abogan por un enfoque menos liberal del uso de corticoides durante el embarazo.
