MADRID, 11 Ene. (EUROPA PRESS) -
Las restricciones al ocio y a la movilidad derivadas de la pandemia, la generalización del teletrabajo y el miedo a practicar deportes que puedan implicar contacto físico o a permanecer en espacios cerrados como el gimnasio, está derivando en un aumento del sedentarismo, según ha alertado el experto del Departamento Científico de Cinfa, Eduardo González.
Así, continúa la tendencia ya iniciada durante los primeros meses de encierro, y que derivó en que más de la mitad de los españoles (56%) realizara menos ejercicio durante marzo y abril, según un estudio llevado a cabo por la Sociedad Española de Obesidad (SEDO). Este descenso de la actividad física, unido a una peor alimentación, dio como resultado que el 44 por ciento de la población aumentara de peso en estos meses del 2020.
Sin embargo, para el experto del laboratorio, las consecuencias de la falta de actividad física van más allá del aumento del peso. "Nuestro cuerpo trabaja como una precisa maquinaria que, para mantenerse en perfecto estado y seguir funcionando correctamente, debe moverse y mantenerse activa", explica, puntualizando que, de no hacerlo, además del sobrepeso o la obesidad, que ya son factores de riesgo de enfermedades crónicas como la diabetes o las cardiopatías, pueden aparecer muchos trastornos de la salud, como problemas circulatorios, dolores musculoesqueléticos, una peor calidad del sueño o estreñimiento.
En cambio, según destaca el experto, la actividad física practicada de forma habitual produce numerosos efectos positivos sobre el organismo. A nivel anatómico, incrementa la masa muscular y la densidad de los huesos, mejora la condición respiratoria y disminuye el riesgo de desarrollar hipertensión y problemas cardiovasculares. También aumenta la fuerza y la resistencia, así como la movilidad y agilidad en personas de edad avanzada, y fortalece el sistema inmunológico.
"Por tanto, incluso en este contexto tan incierto, es crucial seguir practicando actividad física y, si bien la pandemia no nos lo pone fácil, hemos de buscar la manera dedicar un rato cada día al ejercicio físico", ha animado. Su frecuencia e intensidad dependerá de la edad, las capacidades de cada persona, necesidades y estado previo de salud. "Aprovechando que acabamos de comenzar el 2021, se trata de realizar un propósito de año nuevo y apostar por la vida activa: caminar en vez de coger el coche, subir por las escaleras en lugar de utilizar el ascensor o dedicar un rato a pasear en nuestro fin de semana, por ejemplo", recalca González.
DIEZ CONSEJOS PARA EVITAR EL SEDENTARISMO
Así las cosas, el experto de Cinfa ha enumerado diez consejos para hacer frente al sedentarismo durante la pandemia. En primer lugar, aboga por cambiar la actitud y tener la voluntad de moverse más en el día a día. "Por ejemplo, ve andando a los sitios en vez de usar el automóvil o sube por las escaleras en lugar de por el ascensor", recomienda.
Asimismo, anima a practicar media hora de ejercicio físico al día, "aprovechando todo lo posible el aire libre". En caso de hacer deporte, recuerda la importancia de calentar antes, así como de estirar después, "pues ambas precauciones son esenciales para reducir el riesgo de lesiones durante la práctica deportiva moderadamente intensa". Así, explica que los calentamientos previos permiten aumentar la temperatura corporal, lo que facilita la preparación para el ejercicio, mientras que los estiramientos posteriores son clave para aliviar la tensión en músculos y tendones.
En caso de estar confinado, el experto insta a moverse en casa. "Realiza a diario algo de actividad física, según tu edad, nivel de movilidad y situación personal; por ejemplo, puedes caminar dentro de casa durante diez o quince minutos varias veces al día o subir y bajar tramos de escaleras", afirma.
Además, González también aconseja aprovechar las nuevas tecnologías y llevar a cabo actividades como pilates, zumba o aeróbic siguiendo vídeos, tutoriales o aplicaciones del teléfono móvil o la tableta.
Por otro lado, otra recomendación es dedicar algo de tiempo a realizar una tabla de ejercicios. "Igual de efectivo y beneficioso que la actividad aeróbica puede ser realizar series de ejercicios de tonificación o de fuerza y estiramientos; de esta manera, nuestro cuerpo ganará, además de mayor tono y resistencia muscular, más elasticidad en músculos y articulaciones", detalla.
Cuidar la respiración mientras se realiza dicha actividad física también es importante. "No la contengas y acuérdate de expirar el aire en el momento en que haces el esfuerzo y de tomarlo en el momento de la relajación". De esta manera, se rinde más y se reduce el riesgo de lesiones, según González.
En cuanto al teletrabajo, el experto recuerda la importancia de levantarse regularmente. "Permanecer sentado durante demasiado tiempo puede resultar muy nocivo para el organismo, por lo que si tu jornada de trabajo transcurre desde casa, realiza pausas de cinco o diez minutos por cada cincuenta minutos de trabajo frente al ordenador", expone. Con esto, se ayuda a cuidar la espalda, las piernas y la vista, así como a reducir la fatiga mental.
También insiste en que la edad no debe ser un impedimento, siempre y cuando se adecúe la intensidad de la actividad a la capacidad física de la persona, siempre siguiendo las recomendaciones del personal sanitario.
Finalmente, recuerda la importancia de hidratar el cuerpo. "Procura beber alrededor de dos litros de agua al día, pero, sobre todo, antes, durante y después del ejercicio, cuando perdemos una gran cantidad de agua y electrolitos a través del sudor", señala. Asimismo, la hidratación también ayuda a combatir el estreñimiento que puede provocar el sedentarismo.