MADRID, 6 May. (EUROPA PRESS) -
Respirar el humo de los cigarrillos de forma pasiva puede aumentar la vulnerabilidad a la insuficiencia cardíaca, una afección en la que el corazón no bombea tan bien como debería y tiene dificultades para satisfacer las necesidades del organismo, según un estudio presentado en la 70 Sesión Científica Anual del Colegio Americano de Cardiología.
Los datos mostraron que los no fumadores con exposición reciente al humo de segunda mano tenían un 35% más de probabilidades de desarrollar insuficiencia cardíaca en comparación con los que no habían estado en contacto con el tabaco.
La relación entre la exposición al tabaco y la insuficiencia cardíaca se mantuvo, incluso después de controlar otros factores que se sabe que aumentan el riesgo de insuficiencia cardíaca, como los antecedentes de otras enfermedades cardíacas, el colesterol alto y la diabetes.
Aunque estudios anteriores han demostrado el impacto de la exposición al humo de segunda mano en personas con insuficiencia cardíaca existente --por ejemplo, en resultados como la mortalidad, la calidad de vida y la tolerancia al ejercicio--, éste es el primero que muestra una asociación entre la exposición al tabaco y el desarrollo de insuficiencia cardíaca.
"Se suma a la abrumadora evidencia de que el humo de segunda mano es perjudicial --destaca Travis Skipina, médico residente en el departamento de medicina interna de la Escuela de Medicina de Wake Forest, en Estados Unidos y autor principal del estudio--. El humo de segunda mano se ha asociado con los accidentes cerebrovasculares y los ataques cardíacos, pero lo que realmente no se había informado antes era su asociación con la insuficiencia cardíaca, que es una enfermedad muy debilitante y costosa".
El análisis incluyó a 11.219 participantes de la Tercera Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (NHANES) de Estados Unidos que declararon no ser fumadores. Los participantes de esta cohorte de la NHANES fueron seguidos desde 1988 hasta 1994. Tenían una edad media de 48 años, algo más de la mitad eran mujeres (55,9%) y la mayoría (70,5%) eran de raza blanca. Casi 1 de cada 5 tenía evidencia de exposición al humo de segunda mano.
La relación entre el humo de segunda mano y la insuficiencia cardíaca fue mayor en los hombres (en comparación con las mujeres) y entre los que habían declarado un ataque cardíaco o un ictus previo. Los resultados fueron similares en otros subgrupos, incluidos los diferentes grupos étnicos/raciales y los individuos con obesidad y diabetes.
"Por la razón que sea, en los varones, el impacto del humo de segunda mano parece ser más probable que los ponga en riesgo de insuficiencia cardíaca --señala Skipina--. Los varones, en general, tienden a contraer enfermedades cardiovasculares a una edad más temprana y, en general, eran más jóvenes, así que puede que por eso estuvieran predispuestos".
La cotinina sérica es un metabolito de la nicotina que se utiliza para medir los niveles de exposición al humo y suele significar que alguien ha respirado humo de tabaco en el ambiente en los últimos uno o dos días (vida media de 18 a 20 horas). El hecho de que alguien tuviera insuficiencia cardíaca se definió como la respuesta afirmativa a la pregunta de la encuesta: '¿Le ha dicho alguna vez un médico que tiene insuficiencia cardíaca congestiva?'.
Dado que se trata de un estudio transversal, sólo ofrece una instantánea en el tiempo y no puede establecer la causa y el efecto. Además, se basa en un conjunto de datos antiguos. Aun así, Skipina señala que la asociación de la exposición al humo de segunda mano con la insuficiencia cardiaca prevalente persistió incluso en una comparación contemporánea de 3.796 participantes a los que se hizo un seguimiento entre 2003 y 2006, que se produce después de que muchos esfuerzos públicos contra el tabaquismo hayan surtido efecto.
"Incluso con la disminución de la exposición al humo de segunda mano de fondo, todavía se encontró una asociación positiva con la insuficiencia cardíaca --apunta Skipina--. El humo activo y de segunda mano induce un estado proinflamatorio, y los niveles más altos de inflamación afectan a todos los tejidos del cuerpo, y pueden provocar cambios inadaptados en la estructura del corazón y daños en los vasos sanguíneos".
Se necesitan más investigaciones para desentrañar la relación entre el humo de segunda mano, especialmente con la llegada del vaping, y la insuficiencia cardíaca. Aun así, Skipina destaca que los hallazgos son un recordatorio para las personas que tienen insuficiencia cardíaca o están en alto riesgo de desarrollarla de que "deben ser conscientes de que la exposición al humo de segunda mano puede desempeñar un papel".
Señala que esto es aún más relevante para las comunidades y los países con menores ingresos, donde las tasas de consumo de tabaco suelen ser mucho más altas y es menos probable que existan o se apliquen políticas sanitarias estrictas.