Investigadores de CIC bioGUNE demuestran que defectos genéticos al digerir carbohidratos predisponen al colón irritable

Investigación sobre síndrome de colón irritable
Investigación sobre síndrome de colón irritable - CIC BIOGUNE
Publicado: martes, 9 julio 2024 10:47

BILBAO, 9 Jul. (EUROPA PRESS) -

Investigadores de CIC bioGUNE han demostrado que defectos genéticos en forma de cambios en el ADN de los genes involucrados en la digestión de carbohidratos predisponen a padecer el síndrome del intestino irritable (SII).

La investigación, que ha sido publicada en la revista Gut, aporta "nuevas evidencias" de que los defectos genéticos en las enzimas que digieren carbohidratos "pueden contribuir" al SII, han informado en una nota desde CIC bioGUNE.

Este síndrome, que se estima que afecta a una de cada diez personas, carece de escasas opciones terapéuticas, que, además, y generalmente, son de eficacia limitada debido a la etiología desconocida.

El síndrome del intestino irritable es un trastorno gastrointestinal muy prevalente que afecta a alrededor del 10-15% de la población mundial. Los síntomas comunes del SII incluyen dolor abdominal, hinchazón, diarrea y estreñimiento.

Aunque sus causas siguen siendo desconocidas, un número significativo de individuos asocia la aparición de sus síntomas con la ingestión de carbohidratos, y su eliminación o reducción controlada en la dieta parece ser beneficiosa, al menos en algunos pacientes.

El equipo internacional, liderado por el Profesor Ikerbasque Mauro D’Amato del grupo de Investigación en Genética Gastrointestinal de CIC bioGUNE y la Universidad LUM, estudió una serie de enzimas responsables de la descomposición de carbohidratos dietéticos (llamadas CAZimas), y demostró que las variaciones genéticas en los genes correspondientes pueden afectar el riesgo de desarrollar SII en un individuo.

El equipo ya había informado, anteriormente, de los efectos genéticos en la sacarasa-isomaltasa, una enzima que digiere la sacarosa, aumentan el riesgo de SII.

Ahora, a partir del estudio de datos sobre estilos de vida, genética y salud en 366.432 individuos de la cohorte poblacional UK Biobank, los datos proporcionan evidencia similar para otras dos CAZimas, las amilasas AMY1B y AMY2A que digieren el almidón.

Tal y como ha explicado el profesor D’Amato, "la mala digestión de azúcares y/o almidón debido a CAZimas disfuncionales puede llevar a síntomas de SII debido a su acumulación en el intestino inferior donde son fermentados por la microbiota intestinal causando hinchazón, gases, dolor abdominal y diarrea".

Asimismo ha añadido que "la composición genética específica de los genes de las CAZimas también puede explicar por qué algunas personas experimentan síntomas después de consumir alimentos ricos en almidón o sacarosa mientras que otras no", ha concluido.