MADRID, 17 Ago. (EUROPA PRESS) -
La enzima ceramidasa puede ser un nuevo objetivo para tratar las infecciones por SARS-CoV-2, según un estudio realizado por investigadores de la Julius-Maximilians-Universitt de Würzburg (Alemania) y publicado en la revista científica 'Cells'.
La fluoxetina, un antidepresivo común, inhibe el coronavirus SARS-CoV-2 en cultivos celulares y en preparaciones de tejido pulmonar humano. Sin embargo, el mecanismo de esta inhibición no estaba del todo claro, por lo que los equipos continuaron su investigación.
Para ello, desarrollaron la molécula AKS466, que es muy similar a la fluoxetina y también suprime el coronavirus. Tras extensos estudios comparativos, ahora está claro cómo el antidepresivo inhibe la replicación de los coronavirus.
La fluoxetina, así como el AKS466, atrapan los virus en los lisosomas de la célula. En pocas palabras, se trata de pequeñas vesículas en las que tienen lugar los procesos digestivos. En los lisosomas, ambas sustancias activas también suprimen la actividad de un grupo de enzimas, las ceramidasas ácidas. Esto aumenta la concentración de ceramidas, un grupo de lípidos del organismo. El exceso de ceramidas es, en última instancia, el responsable de impedir que el coronavirus SARS-CoV-2 se reproduzca.
"La enzima ceramidasa es una nueva estructura objetivo completamente inesperada para la terapia antiviral", afirma el profesor Jochen Bodem, líder del estudio, que ha sido financiado por la empresa farmacéutica Novartis y el estado alemán de Baviera.
Los nuevos hallazgos son significativos para la lucha contra el SARS-CoV-2. Por un lado, las ceramidas podrían ser directamente adecuadas como agentes activos contra el virus.
Por otro lado, la molécula similar a la fluoxetina AKS466 podría ser superior a la original. Esto se debe a que la fluoxetina inhibe el grupo enzimático de las esfingomielinasas ácidas, lo que provoca efectos secundarios cuando se utiliza. El AKS466 no inhibe estas enzimas, por lo que debería tener menos efectos secundarios adversos.
Así, estos investigadores alemanes muestran dos nuevas vías que podrían conducir a una terapia mejorada de las infecciones por SARS-CoV-2. A continuación, les gustaría aclarar la cuestión de cómo las dos sustancias activas consiguen atrapar los coronavirus en los lisosomas.