Investigan un fármaco que podría superar la resistencia al tratamiento en leucemia mieloide aguda
MADRID 16 Dic. (EUROPA PRESS) -
Expertos del Centro Oncológico de la Universidad de Cincinnati (Estados Unidos) presentan en la 66.ª Reunión y Exposición Anual de la Sociedad Estadounidense de Hematología (ASH) en San Diego (Estados Unidos) un ensayo clínico que revela que un fármaco contra la leucemia mieloide aguda es seguro en voluntarios sanos.
Se trata de un ensayo aleatorizado de fase 1 en voluntarios sanos que descubrió que un nuevo fármaco dirigido al tratamiento de la leucemia mieloide aguda (LMA) resistente es seguro y alcanza niveles farmacológicos que predecirían la respuesta en esta enfermedad.
Hasta el 30% de los pacientes con LMA tienen una mutación específica llamada FLT-3, y la Administración de Alimentos y Medicamentos aprobó en 2018 un tratamiento estándar para FLT-3 llamado gilteritinib. Pero a medida que el cáncer ha evolucionado, los pacientes han desarrollado tanto intolerancia como resistencia al gilteritinib.
Los miembros del Laboratorio de Desarrollo de Fármacos y Leucemia (LDDL) del Centro Oncológico, entre ellos John Byrd; Erin Hertlein; y Ola Elgamal, se asociaron con la compañía farmacéutica Eilean Therapeutics para identificar un nuevo fármaco desde la materia química inicial en el laboratorio hasta los ensayos en la clínica para tratar la leucemia mieloide aguda resistente al tratamiento con mutación FLT-3. Después de probar más de 60 compuestos desarrollados junto con la compañía, los investigadores encontraron que uno de ellos, el lomonitinib, parece ser el más efectivo en las pruebas preclínicas de nuevos modelos animales creados por LDDL.
A partir del trabajo preclínico, Eilean, en colaboración con miembros del LDDL, intentó reducir los riesgos de lo que parecía ser un fármaco muy seguro y eficaz dirigido a la leucemia mieloide aguda resistente al FLT-3. Se inscribieron un total de 24 voluntarios sanos en el ensayo informado, que incluyó aumentos proporcionales a la dosis en la exposición similares a la dosis que probablemente necesitaría un paciente con leucemia mieloide aguda para que el fármaco fuera eficaz. No se informaron eventos adversos.
"El uso de estudios con voluntarios sanos para reducir el riesgo de nuevas terapias contra el cáncer y también minimizar la exposición de los pacientes a dosis ineficaces fue posible gracias al perfil de seguridad preclínico del lomonitinib", cuenta Byrd.
Por otra parte, el equipo de LDDL también se asoció con Eilean Therapeutics para identificar y desarrollar un nuevo compuesto que ataca a una proteína llamada MALT1, un componente clave de una vía de señalización de la que dependen la leucemia linfocítica crónica (LLC) y otros cánceres de células B para crecer y prosperar.
"El desarrollo de combinaciones de medicamentos que puedan dirigirse a más de una vía de señalización ofrecerá un mejor control de la enfermedad", destaca Sara Elgamal, miembro del Centro de Cáncer y científica investigadora de la Facultad de Medicina de la UC.
Elgamal asegura que el compuesto es un degradador que puede inhibir tanto la función enzimática como el andamiaje de MALT1. "La inhibición de ambas funciones lo hace superior a otros fármacos que solo pueden inhibir su función enzimática", confirma Elgamal. "Utilizando modelos de líneas celulares y células de leucemia humana, hemos demostrado una potente degradación de MALT1". El compuesto también mostró un beneficio de supervivencia en un modelo animal de leucemia de células B.