MADRID 29 Dic. (EUROPA PRESS) -
Una investigación publicada en el 'Journal of the American Heart Association' ha revelado que los aumentos modestos de la presión arterial también pueden asociarse a un mayor riesgo de muerte e insuficiencia cardiaca entre los afroamericanos de cualquier edad.
Un panel de expertos decidió en 2014 aumentar los niveles máximos de presión arterial recomendados para las personas de más de 60 años que no tengan otra enfermedad, de 140/90 a 150/90 milímetros de mercurio (mmHg), pero la falta de datos al respecto impedía trasladar estas recomendaciones a la población afroamericana.
Para ello, los investigadores analizaron los datos de hipertensión y el riesgo de muerte y hospitalización por insuficiencia cardiaca de 5.280 pacientes afroamericanos inscritos en el 'Jackson Heart Study' realizado entre 2000 y 2011 en el estado de Mississippi.
Casi dos tercios eran mujeres, con una media de edad de 56 años, y el estudio incluyó un seguimiento de nueve años para analizar el índice de mortalidad y de siete años para ver el riesgo de ingreso por insuficiencia cardiaca.
De este modo, vieron que los aumentos de la presión arterial sistólica se asociaron con un mayor riesgo de muerte e insuficiencia cardiaca en todos los grupos de edad, y con apenas 10 mmHg más el riesgo ya aumentaba un 12 por ciento.
El riesgo de muerte fue mayor entre los pacientes menores de 60 años, que se enfrentaron a un aumento del 26 por ciento de riesgo por cada 10 mmHg de aumento de la presión arterial, en comparación con menos del 10 por ciento entre los mayores de 60 años.
"Este estudio observacional debe llevarnos a cuestionar si las actuales directrices han identificado el objetivo óptimo para el control de la presión arterial en la población afroamericana", ha reconocido Tiffany C. Randolph, investigadora principal del estudio que ahora trabaja en el Cone Health Medical Group HeartCare de Greensboro.