MADRID, 8 Mar. (EUROPA PRESS) -
Investigadores de la Georgia Southern University en Statesboro (Estados Unidos) han comprobado como cada vez son menos las personas que intentan perder peso pese a que el sobrepeso y la obesidad sigue en continuo crecimiento, lo que podría deberse a una posible aceptación social de este problema.
Así se desprende de los resultados de un estudio publicado en la revista 'Journal of the American Medical Association' (JAMA), que muestra que en los últimos 30 años la proporción de adultos con sobrepeso y obesidad en Estados Unidos ha aumentado del 53 al 66 por ciento mientras que, por contra, la proporción de quienes intentan reducir algunos kilos de más ha bajado del 56 al 49 por ciento en el mismo periodo.
Perder peso es difícil y mantenerlo más todavía, lo que podría explicar esta supuesta pérdida de interés por adelgazar, según ha reconocido Jian Zhang, investigador que ha liderado el estudio, que también teme que esto pueda deberse a que hay personas obesas o con sobrepeso que se sienten cómodos con su peso actual.
"Esto podría explicarse, al menos parcialmente, al aumentar la evidencia de que los adultos con sobrepeso pueden vivir tanto e incluso más que aquellos que tienen un peso normal", según este experto. De hecho, ese menor interés en adelgazar fue más palpable en los adultos con sobrepeso que en los obesos.
Para su trabajo, Zhang y su equipo analizaron datos de una encuesta nacional de salud relativa a tres periodos: de 1988 a 1994, de 1999 a 2004 y de 2009 a 2014. Entre otras cosas, la encuesta preguntaba a las personas con sobrepeso u obesidad cuantos intentos por bajar de peso habían iniciado en los últimos 12 meses.
Las mujeres de raza negra con sobrepeso fueron el subgrupo de población en el que más cayó ese esfuerzo por perder peso en todo el periodo de estudio. Así, mientras que a finales de los años 80 y principios de los 90 el 66 por ciento de estaban intentando adelgazar, en el último periodo de estudio sólo lo intentaban el 55 por ciento.
Al mismo tiempo, la proporción de sobrepeso y obesidad en mujeres negras también aumentó en este periodo mucho más que entre las mujeres blancas, ya que al final del estudio un 79 por ciento estaban por encima de su peso normal, frente al 59 por ciento de las mujeres blancas.
Entre las limitaciones del estudio que admiten los autores está la dificultad de los participantes de recordar con exactitud el peso y la altura que tenían, necesario para calcular su índice de masa corporal (IMC) y saber si pueden presentar sobrepeso u obesidad.