MADRID 11 Jul. (EUROPA PRESS) -
El director de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), Rafael Matesanz, ha mostrado su satisfacción por el primer trasplante bilateral de piernas del mundo realizado por el doctor Pedro Cavadas en el Hospital La Fe de Valencia y ha asegurado que el receptor tendrá que someterse a partir de ahora a una rehabilitación "muy dura" que durará "bastantes meses o incluso años".
La intervención fue autorizada hace más de un año por la Comisión de Trasplantes del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) y, según ha explicado Matesanz en declaraciones a Europa Press, se aprobó porque "la amputación de ambas piernas era a una altura alta y, por tanto, no se podían utilizar prótesis".
"Cuando la amputación se da en una pierna o en las dos por debajo de la rodilla, no está justificado someterle al riesgo de una inmunosupresión de por vida y a una rehabilitación muy prolongada", explica el director de la ONT.
De este modo, y tras asegurarse de que el paciente asumía "los pros y los contras de la intervención", se autorizó la búsqueda de un donante que se ajustase a las características del receptor.
Tras finalizar la intervención en la mañana de este lunes, Matesanz reconoce que hay que esperar al postoperatorio y a que el paciente "esté estabilizado" para analizar cómo se desarrolla la inervación de los músculos y los nervios tras una intervención hasta ahora inaudita.
"La rehabilitación será como la de un trasplante de brazos, con la diferencia de que, en este caso, las extremidades trasplantadas deben sostener todo el cuerpo", apunta.
No obstante, el objetivo es que tras esta rehabilitación el paciente consiga caminar. "Es lo que esperamos", reconoce Matesanz, ya que "si no, no se hubiese hecho la intervención". "La operación se hace para resolver un problema al enfermo, que si no se sometía a la operación iba a estar en silla de ruedas de por vida", añade.
El director de la ONT ha felicitado al doctor Cavadas y su equipo porque, además, se trata del primer acto quirúrgico específico del que España es pionera y, por tanto, "podemos estar orgullosos de ello".
De hecho, ha reconocido que hay otros países que se han mostrado muy interesados en esta intervención desde que se autorizó hace un año, como Reino Unido, donde ven en este tipo de trasplantes una "opción de futuro" para aquellos soldados que perdieron sus piernas en combate.