MADRID, 10 Jul. (EUROPA PRESS) -
La mitad de las personas con baja visión han perdido calidad visual durante el confinamiento y el 47 por ciento ha reducido sus salidas debido a la dificultad para orientarse y mantener la distancia de seguridad, según una encuesta realizada por la Sociedad Española de Especialistas en Baja Visión (SEEBV).
El objetivo del trabajo, en el que se han entrevistado a 131 personas (62% hombres y 38% mujeres) ha sido valorar el impacto que ha tenido el confinamiento en la vida diaria de las personas que tienen problemas de baja visión.
Concretamente, el principal problema con el que se han topado las personas con baja visión ha sido mantener la distancia de seguridad con otras personas (41%), seguido de quienes han tenido problemas para orientarse o desplazarse por su ciudad (37%).
Pero el confinamiento no solo ha afectado a cómo se relacionan las personas con baja visión con el espacio público, sino también con el privado. Y es que, un 24 por ciento afirmó haber experimentado una mayor dificultad para encontrar objetos u orientarse en casa, mientras que para un 19 por ciento fue más difícil realizar tareas del hogar como limpiar o cocinar.
Asimismo, un 35 por ciento de quienes reciben tratamiento médico lo vieron interrumpido a causa del confinamiento, con el evidente prejuicio que ello causa. Sin embargo, aquellos que reciben un tratamiento inaplazable lo ha seguido recibiendo (65%). Como cualquier otra persona durante estos meses, quienes padecen baja visión han sentido tristeza (65%), ansiedad (59%) y miedo (40%).