MADRID, 15 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los jóvenes que viven en barrios menos transitables, y con un menor nivel socioeconómico, caminan menos y practican menos actividad física, en comparación con quienes viven en zonas más caminables y de mayor nivel socioeconómico, según un estudio realizado por la Gasol Foundation y en el que participa una quincena de centros de investigación españoles, publicado en la revista 'Plos One' y ofrecido por SMC España.
La caminabilidad, entendida como la facilidad de movilidad peatonal para realizar actividades físicas en un entorno, unida a un mayor estatus socioeconómico, ofrece "más oportunidades, más instalaciones deportivas y más deporte organizado", según Susana Aznar, del Departamento de Actividad Física y Ciencias del Deporte de la Universidad de Castilla-La Mancha y directora del Grupo Promoción de la Actividad Física para la Salud (PAFS), y colaboradora del estudio.
En este sentido, la investigación revela que la media más baja de minutos dedicados al ejercicio (44,3 minutos/día) se encuentra entre los jóvenes de 8 y 16 años ubicados en vecindarios menos transitables de bajo nivel socioeconómico, en contraste con los otros tres grupos estudiados (entorno poco transitable pero alto nivel socioeconómico; entorno transitable pero bajo nivel socieconómico; y entorno transitable y alto nivel socieconómico), con un promedio de 47,9 minutos.
Así, a pesar de identificarse una mayor práctica deportiva durante los fines de semana en todos los grupos, se observa una disminución del tiempo dedicado a caminar en vecindarios con bajo nivel socioeconómico y menor caminabilidad (48,5 minutos al día), frente a los barrios con mayor estatus socieconómico y caminabilidad (50.6 minutos).
Por otro lado, el estudio manifiesta que los jóvenes en entornos de bajo nivel socioeconómico menos transitables dedican un total de 29,8 minutos al día a deportes en grupo, frente a los 50.6 minutos al día observados en jóvenes de entornos transitables y de mayor estatus, así como 23,7 y 25,7 minutos al día, respectivamente, a deportes individuales.
ENTORNO RURAL Y URBANO
De igual manera, el estudio precisa que, los jóvenes ubicados en entornos de caminabilidad favorable y mayor nivel socieconómico, en entornos rurales, dedican 52,7 minutos al día a caminar, frente a los jóvenes urbanos de barrios de tránsito desfavorecido y bajo estatus socioeconómico, quienes dedican 44,2 minutos.
Así, en cuanto a los deportes de equipo, los jóvenes pertenecientes a entornos de tránsito favorable y mayor nivel socieconómico, en entornos rurales, dedican 45,9 minutos al día a deportes en grupo, frente a los a los jóvenes de barrios ubicados en la ciudad con caminabilidad desfavorecida y de bajo estatus socioeconómico, los cuales dedican 31,4 minutos.
"Estamos implementando intervenciones de promoción de la actividad física y de los hábitos saludables, precisamente en esos entornos urbanos de baja caminabilidad y de bajo nivel socioeconómico, intentando compensar las desigualdades sociales a las que se enfrenta la población infantil que crece en esos barrios", precisa Susana Aznar.
"Nos encontramos que son barrios, por ejemplo, con muchas pendientes, en algunos casos que dificultan los desplazamientos activos, sobre todo si vas acompañado de otra persona adulta donde su estado de forma se ha deteriorado a lo largo de su vida". "El código postal es casi tan importante como el código genético para la salud", añade.
"Los resultados que salen de este estudio son extrapolables al conjunto de la población infantojuvenil de 8 a 16 años en España y para conseguir ese muestreo representativo se hizo un muestreo por etapas, concretamente cuatro etapas", comenta el director global de Investigación y Programas de la Gasol Foundation y miembro del CIBER de Epidemiología y Salud Pública, Santi Gómez.
Esta investigación, que forma parte del estudio 'Pasos', ha contado con la participación de 3.887 adolescentes y niños de entre 8 y 16 años procedentes de 245 escuelas de 121 localidades españolas, de las 17 comunidades autónomas.
Como resultado, el informe demanda una serie de intervenciones en favor de mejorar estas cifras recogidas, tales como la creación de acciones comunitarias para promover estilos de vida activos entre los niños españoles y los adolescentes; proporcionar entornos transitables, independientemente de los niveles socioeconómicos; u ofrecer mejores instalaciones deportivas y actividades físicas más organizadas.
"Esta investigación es un referente para el futuro en el diseño de políticas de planificación y estudios de intervención destinados a incrementar los niveles de AF entre Niños y adolescentes españoles, y potencialmente para otros países de Europa y más allá", concluyen en el informe.