MÁLAGA 8 Feb. (EUROPA PRESS) -
La posible influencia entre la exposición solar y los niveles de ácido fólico en sangre que presentan las personas ha sido un tema muy debatido entre especialistas de todo el mundo, sin embargo, nunca se había demostrado. Ahora, investigadores de la Universidad de Málaga (UMA) han evidenciado, por primera vez, que los niveles de ácido fólico disminuyen notablemente en los meses con mayor incidencia de radiación solar.
Este equipo de científicos ha determinado un umbral de riesgo estacional entre pacientes con déficit de esta vitamina, constatándose que la radiación ultravioleta afecta directamente en la proporción de folato en el cuerpo.
Un trabajo desarrollado desde el Laboratorio de Fotobiología Dermatológica de la UMA, que se ubica en el Centro de Investigaciones Médico Sanitarias (CIMES), en el que han analizado a más de 100.000 pacientes de las unidades hospitalarias de Málaga durante cinco años, han precisado desde la universidad en un comunicado.
"Hemos detectado que se repiten los ciclos anualmente. El porcentaje de valores bajos aumenta en verano casi un 3,5 por ciento respecto al invierno", según ha indicado el investigador José Aguilera, quien, además, ha agregado que, independientemente de la estacionalidad, los niveles de ácido fólico son más bajos en hombres que en mujeres.
Con estos resultados, los expertos recomiendan que los pacientes con valores de ácido fólico inferior a 4 ng/mL incorporen a su dieta en los meses de verano alimentos ricos en esta vitamina como las legumbres o las verduras de hoja verde, y que, incluso, en casos de bajo déficit, tomen suplementos.
ESENCIAL PARA EL CRECIMIENTO CELULAR
El ácido fólico es esencial para la división y crecimiento celular. Su insuficiencia se relaciona con diversas patologías como la anemia megaloblástica, defectos en el tubo neural o enfermedades cardiovasculares. Se trata, por tanto, de una vitamina, la B9, de vital importancia para las personas, ya que influye, por ejemplo, en la incorporación de hierro de anemia, o, en el caso de los bebes, ayuda a prevenir que nazca con discapacidades congénitas, de ahí su importancia durante el embarazo.
Desde el año 2006, investigadores de la Universidad de Málaga trabajan en la búsqueda de nuevas tendencias en fotoprotección, hacia líneas inéditas que avancen en la relación luz y piel, a través del laboratorio de Fotobiología Dermatológica, único en España.
El estudio de los efectos positivos de la vitamina D para prevenir ciertas enfermedades como las digestivas y cardiovasculares o el desarrollo de filtros solares más eficientes y duraderos, a partir de compuestos sintéticos, pero inspirados en algas marinas, son otras de sus líneas de I+D+i.