MADRID, 18 Oct. (EDIZIONES) -
No gozar de buenos niveles de tensión arterial puede llevarnos a desarrollar enfermedades graves que, en última instancia, incluso pueden comprometer nuestra propia vida. De hecho, según destaca el doctor Vicente Pallarés, médico de Familia y coordinador del Grupo de trabajo de Hipertensión Arterial y Enfermedad Cardiovascular de SEMERGEN, "la hipertensión es una patología muy importante porque representa la primera causa por la que la población mundial enferma o muere, muy por delante del tabaco o de la obesidad, por ejemplo".
En una entrevista con Infosalus, el también profesor de Medicina en la Universidad Jaume I de Castellón subraya que la presión arterial alta es a su vez un factor de riesgo de otras patologías cardiovasculares, a la par que es silenciosa. "Es aquí donde está el gran problema porque si algo no nos condiciona en el día a día le hacemos poco o nulo caso, cuando sus consecuencias pueden ser muy importantes", remarca.
De hecho, el doctor Pallarés reconoce que es frecuente que durante los 20-25-30 años ni le prestamos la más mínima atención a nuestra tensión arterial, cuando esta evoluciona a lo largo de los años. "Pero a partir de los 40 es idónea, y una vez cada dos años, la valoración cardiovascular, donde se tome la presión arterial en ambos brazos, y si las cifras salen por encima de 140-90 de mínima evidentemente nos tenemos que poner en guardia", afirma.
POR QUÉ PUEDE AUMENTAR NUESTRA TENSIÓN ARTERIAL
Con ello, remarca que nos puede elevar la tensión una crisis de ansiedad, un problema crónico en el trabajo, o por ejemplo problemas familiares que hiperactivan el sistema nervioso, que regula el sistema cardiovascular y el digestivo, que entre sus distintas acciones hacen que aumente la presión arterial.
Otras cuestiones que hacen que la presión arterial suba, según prosigue el especialista de SEMERGEN, son el uso continuado de sustancias, el tabaquismo, de estupefacientes, el consumo elevado de sal en las comidas, el uso o abuso de alcohol, la obesidad, así como el sedentarismo.
Dentro de medicamentos sí que hace una advertencia a los pacientes sobre el uso de medicamentos efervescentes porque estos llevan un alto consumo de sodio, por lo que en pacientes con cifras elevadas de presión arterial es mejor evitarlos, considera.
A su vez, menciona que una causa de hipertensión secundaria es preguntar también por el uso de algunas sustancias que se puedan comprar en herboristerías, como el regaliz, causa tradicional de que a alguien le suba tensión; o bien el uso de metanfetamina; aparte del abuso indiscriminado de antiinflamatorios (ibuprofeno, diclofenaco, entre otros), que también puede conducir a que suba la presión arterial.
SÍNTOMAS DE QUE NOS PUEDE HABER SUBIDO LA TENSIÓN
Ahora bien, este médico de familia alerta de que en un 90% de los casos las personas que tienen una subida de tensión no lo notan porque no presentan síntomas. Indica que puede subirte la tensión y no darte cuenta. "En algunas ocasiones esto se manifestará como una cefalea, con un dolor de cabeza que no es el habitual, y normalmente localizado en la zona de la nuca, y que también nos puede poner en alerta", manifiesta Pallarés.
Así, índice este experto en que puede ser peligroso que nos suba la tensión porque nuestro cuerpo no sea capaz de sopórtalo y nos demos un susto, desde una hemorragia en cualquier territorio vascular, o cualquier otro problema porque tenemos además otras patologías asociadas a la presión arterial alta, y "que también por desgracia son silenciosas", como el ictus, la hemorragia cerebral, la hemorragia de retina o la conjuntival, entre otras.
"La presión arterial sube conforme cumplimos años. Los antecedentes familiares nos ponen sobre la pista, sobre todo esa primera generación que son hipertensos debería condicionarnos para preocuparnos más por nuestra salud y tomarnos la tensión de forma periódica. Si nos sube la tensión debemos siempre consultar al médico de familia", resalta el doctor Pallarés.
CÓMO CONTROLARLA
A la hora de mantenerla a raya, el miembro de SEMERGEN suele recomendar ejercicio, perder peso, regular la ingesta de sal, aunque eso sí, sí incide en que ya no tanto la sal sino el sodio, conservante en muchos alimentos.
Destaca también la importancia de cuidar el estilo de vida: no fumar, ejercicio habitual, llevar una alimentación lo más saludable posible, evitando el exceso de calorías vacías, o de alimentos con grasas saturadas, tener un peso equilibrado en función de nuestra talla y perímetro abdominal, y hacernos revisiones periódicas
"Si en el plazo de seis meses máximo no se regula nuestra presión arterial tras seguir estos consejos quizá lo idóneo sea introducir algún tipo de ayuda farmacológica que nos ayude a regularizar esas cifras porque cuanto antes lo hagamos mejor nos irá. La hipertensión evoluciona a lo largo de los años y su principal incidencia es en el corazón, en el cerebro, en los riñones, o en los ojos, y nos puede afectar", mantiene el doctor Pallarés.
Reitera que la hipertensión no da síntomas mientras avanza, pero sí cuando ya está muy evolucionada, pudiendo manifestarse como un infarto, un ictus, enfermedad arterial periférica, insuficiencia renal, o retinopatía hipertensiva que puede dar lugar a ceguera. "Otro de los problemas de la hipertensión es que nunca viaja sola, pero puede ir acompañada de colesterol y de diabetes", apostilla.
Sostiene que en el embarazo, si se han tenido problemas de cifras altas de tensión (eclampsia o preclampsia), o de azúcar elevado, se debe intentar promover un seguimiento desde ahí porque la enfermedad cardiovascular en estas mujeres se desarrolla de forma más grave y en edades más tempranas.
A la hora de medirla, este doctor recomienda hacerlo con tranquilidad. Si se es fumador dice que no hay que hacerlo en la hora previa, ni hacer ejercicio en los 10 minutos previos, y nunca conformarse con primera lectura, "si son tres mejor, bien sentado, sin cruzar piernas". "Lo ideal es coger las dos últimas y promediarlas y esta cifra es la que si luego vamos al médico de familia es lo que más valor nos va a dar, mucho más que tomarla en Urgencias o en un centro de salud de forma urgente", sentencia este médico de familia.