MADRID 24 May. (EUROPA PRESS) -
La leche materna puede promover una salud infantil equitativa y ahorrar costos de atención médica al reducir las enfermedades infantiles y la utilización de la atención médica en los primeros años, según un nuevo estudio publicado en la revista 'PLOS ONE' por Tomi Ajetunmobi y su equipo del Centro de Salud de la Población de Glasgow (Reino Unido).
Anteriormente se había descubierto que la lactancia materna promueve el desarrollo y previene enfermedades entre los bebés. En Escocia -así como en otros países desarrollados- se cree que las bajas tasas de lactancia materna en zonas económicamente más desfavorecidas contribuyen a las desigualdades en la salud de la primera infancia. Sin embargo, las políticas gubernamentales para promover la salud infantil han logrado pocos avances y es posible que se necesiten más pruebas sobre la eficacia de las intervenciones.
En el nuevo estudio, los investigadores utilizaron conjuntos de datos administrativos sobre 502.948 bebés nacidos en Escocia entre 1997 y 2009. Había datos disponibles sobre si los bebés fueron amamantados o no durante las primeras 6 a 8 semanas, la aparición de diez afecciones infantiles comunes desde el nacimiento hasta los 27 meses, y el detalle de ingresos hospitalarios, consultas de atención primaria y prescripciones.
Entre todos los bebés incluidos en el estudio, el 27% fueron amamantados exclusivamente, el 9% alimentados con alimentación mixta y el 64% con fórmula durante las primeras 6 a 8 semanas de vida. Las tasas de lactantes amamantados exclusivamente oscilaban entre el 45% en las zonas menos desfavorecidas y el 13% en las zonas más desfavorecidas.
Los investigadores encontraron que, dentro de cada quintil de privación, los bebés amamantados exclusivamente utilizaban menos servicios de atención médica e incurrían en costos más bajos en comparación con los bebés alimentados con leche de fórmula.
En promedio, los bebés amamantados tuvieron costos promedio de atención hospitalaria por admisión más bajos en comparación con los bebés alimentados con fórmula en los primeros seis meses de vida y menos consultas al médico de cabecera, que los lactantes alimentados con fórmula. Los investigadores calcularon que se podrían haber evitado al menos 10 millones de libras en costos de atención médica si todos los bebés alimentados con fórmula hubieran sido amamantados exclusivamente durante las primeras 6 a 8 semanas de vida.
Los autores concluyen que la lactancia materna tiene importantes beneficios económicos y para la salud y que el aumento de las tasas de lactancia materna en las zonas más desfavorecidas podría contribuir a reducir las desigualdades en los primeros años.