MADRID 5 Feb. (EUROPA PRESS) -
Investigadores del Duke Human Vaccine Institute (DHVI) de la Universidad de Duke (Estados Unidos) publican en 'Science Advances' un trabajo en el que han identificado un movimiento ultrarrápido en la superficie del virus del VIH Los anticuerpos dirigidos a esta parte móvil podrían ser clave para un nuevo enfoque de vacuna.
En concreto, mientras el virus VIH se desliza fuera de una célula humana para acoplarse y posiblemente inyectar su mortal carga de código genético, hay un momento espectacularmente breve en el que una pequeña parte de su superficie se abre para comenzar el proceso de infección.
Ver esa estructura abrirse y cerrarse en apenas una millonésima de segundo les está dando a los investigadores un nuevo control sobre la superficie del virus que podría conducir a anticuerpos ampliamente neutralizantes para una nueva vacuna. La clave estaría en ser capaces de unir un anticuerpo específicamente a esta pequeña estructura para evitar que se abriera.
La estructura móvil que encontraron protege el sensible sitio de unión del correceptor del virus. Para ver las partes virales en varios estados abiertos, cerrados e intermedios, los investigadores utilizaron un acelerador de electrones en el Laboratorio Nacional Argonne en las afueras de Chicago que produce rayos X en longitudes de onda que pueden resolver algo tan pequeño como un solo átomo.
Pero este costoso equipo compartido tiene una gran demanda. Los investigadores del SIDA recibieron tres bloques de 120 horas de tiempo con el sincrotrón para intentar obtener la mayor cantidad de datos posible en sesiones maratónicasLa parte móvil es una estructura llamada glicoproteína de la envoltura, y los investigadores del SIDA han estado tratando de descifrarla durante años porque es una parte clave de la capacidad del virus para acoplarse a un receptor de células T conocido como CD4.
Muchas partes de la envoltura se mueven constantemente para evadir el sistema inmunológico, pero los inmunógenos de las vacunas están diseñados para permanecer relativamente estables.