Archivo - Un niño con mascarilla en un aula del Colegio Privado Alameda de Osuna en el primer día del curso escolar 2020-2021, en Madrid (España) a 7 de septiembre de 2020.
Archivo - Un niño con mascarilla en un aula del Colegio Privado Alameda de Osuna en el primer día del curso escolar 2020-2021, en Madrid (España) a 7 de septiembre de 2020. - Jesús Hellín - Europa Press - Archivo
Publicado: lunes, 4 abril 2022 13:58


MADRID, 4 Abr. (EUROPA PRESS) -

Una nueva investigación de la Facultad de Medicina de la Universidad Case Western Reserve (Estados Unidos) sugiere que los niños menores de 5 años infectados por la variante ómicron de la COVID-19 tienen menos riesgo de sufrir resultados de salud graves que los infectados por la variante delta.

El estudio, publicado en la revista científica 'JAMA Pediatrics', es el primer esfuerzo de investigación a gran escala para comparar los resultados de salud de la infección por coronavirus de ómicron a delta en niños de 4 años o menos, el grupo de edad que aún no puede ser vacunado.

Los resultados muestran que la variante ómicron es entre 6 y 8 veces más infecciosa que la variante delta. Los resultados clínicos graves iban desde un 16 por ciento menos de riesgo de visitas a urgencias hasta un 85 por ciento menos de riesgo de ventilación mecánica. Y alrededor del 1,8 por ciento de los niños infectados con ómicron fueron hospitalizados, en comparación con el 3,3 por ciento con delta.

El equipo analizó las historias clínicas electrónicas de más de 651.640 niños en los Estados Unidos que tuvieron un encuentro médico con organizaciones sanitarias entre 9/2021 y 1/2022, incluyendo más de 22.772 niños infectados con ómicron a finales de diciembre y finales de enero, con más de 66.000 niños infectados cuando delta era prevalente en el otoño. El estudio también comparó los registros de más de 10.000 niños inmediatamente antes de la detección de ómicron en EE.UU., pero cuando delta seguía siendo predominante.

El equipo examinó los resultados clínicos de salud de los pacientes pediátricos durante una ventana de 14 días tras la infección por el SARS-CoV-2. Entre los factores que revisaron estaban: las visitas a urgencias, las hospitalizaciones, los ingresos en la UCI y el uso de ventilación mecánica.

Otros análisis de datos demográficos revelaron que los niños infectados por ómicron eran, por término medio, más jóvenes (1,5 años de edad frente a 1,7) y presentaban menos comorbilidades.

"La principal conclusión de nuestra investigación fue que había muchos más niños infectados por ómicron en comparación con delta, pero los niños infectados no sufren un impacto tan grave como el de los niños infectados por la variante delta. Sin embargo, como hay muchos más niños infectados, nuestros hospitales se vieron afectados durante los meses de invierno por una afluencia de niños pequeños", explica una de las responsables de la investigación, Pamela Davis.