MADRID, 21 Mar. (EUROPA PRESS) -
El coordinador del Programa de Enfermedades Transmisibles, Tuberculosis Conjunta, VIH y Hepatitis de la región europea de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Masoud Dara, ha avisado este martes de que no se va a lograr alcanzar en 2035 el objetivo de erradicar la tuberculosis en el mundo debido a la falta de recursos para prevenir y tratar esta enfermedad.
El experto se ha pronunciado así durante la 6ª Jornada de Actualización de la Tuberculosis, organizada por la Red contra la Tuberculosis y por la Solidaridad (Red TBS) con motivo de la celebración, el próximo 24 de marzo, del Día Mundial de la enfermedad, que este año lleva por lema 'Unidos para poner fin a la tuberculosis'.
Y es que, aunque la incidencia de la enfermedad se ha reducido en torno al 4 por ciento, todavía quedan "muchos esfuerzos" por hacer para erradicarla. En este sentido, el experto de la OMS ha alertado de que lo que más preocupa a la comunidad científica son los casos de tuberculosis multirresistentes a fármacos y la coinfección con el VIH que, actualmente, afecta al 9 por ciento de todos los enfermos.
"Hasta que no podamos tratar de forma correcta a todos los pacientes vamos a seguir aumentando las resistencias a los tratamientos. El problema que tenemos en la actualidad es que hay pocos medicamentos y las terapias son muy costosas y largas. Por ello, y si no se aumenta la investigación, no vamos a poder alcanzar el objetivo de acabar con la tuberculosis en 2035", ha argumentado Dara.
Para mejorar los recursos, prosigue, se necesita que los países aumenten la inversión para investigar la enfermedad y, por ende, animen a las compañías farmacéuticas a encontrar nuevas formas de tratamiento y, de esta forma, se "interesen" por la enfermedad que cada año provoca la muerte de 1.500.000 personas en todo el mundo, 300.000 más que el VIH.
ESPAÑA, CON LAS TASAS DE INCIDENCIA MÁS ALTAS DE EUROPA
Todos estos problemas de falta de financiación para investigar nuevos tratamientos, así como de acceso a los recursos disponibles se encuentran también en España o, al menos, así lo han asegurado el presidente del Comité Científico de la Red TBS, Julio Ancochea, y el secretario general de la Red TBS y responsable del Área TIR de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), Javier García.
Concretamente, cada año se diagnostican en España unos 5.000 nuevos casos, de los cuales, y aunque el 95 por ciento se curan, unos 3.500 corresponden a tuberculosis respiratorias, más de 50 a meningitis tuberculosa y unos 1.000 a otros tipos de tuberculosis. Además, entre el 6 y el 7 por ciento tiene tuberculosis y VIH, porcentaje ligeramente inferior al 11 por ciento a nivel global.
De hecho, España cuenta con la tasa de incidencia de la enfermedad "más alta" de los países del entorno, sólo por detrás de Portugal y Grecia. En este sentido, García Pérez ha informado de que el 30 por ciento de los pacientes son inmigrantes de entre 25 y 35 años que viven en España, porcentaje que asciende hasta el 45 o 50 por ciento en el caso de las grandes ciudades como Madrid o Barcelona.
Ahora bien, el secretario general de la Red TBS ha explicado que en el caso de los pacientes españoles, los principales afectados son personas mayores de 65 años, debido a que su sistema inmunitario es más débil y a que muchos tratamientos crónicos bajan las defensas.
Por comunidades autónomas, según datos facilitados por SEPAR, las mayores incidencias de tuberculosis se encuentran en Ceuta, con una tasa de casos por cada 100.000 habitantes del 20,12; y Melilla (18,86) y Galicia (16,03), "muy superior" a la media española del 7,56. Por su parte, Extremadura es la región con la tasa más baja (1,19), seguida por Castilla La Mancha (5,01) y Canarias (5,46). Asimismo, en el total de casos registrados, Cataluña con 612, Andalucía (529) y Madrid (471) se llevan la "peor parte".
"Es una enfermedad que no aparece en los medios y que no genera noticias a pesar de que es una patología social que afecta a los colectivos más desfavorecidos", ha apostillado Ancochea. Esta declaración ha sido corroborada por el responsable del Plan de Salud de Cruz Roja Española, Juan Jesús Hernández, quien ha advertido de que la medicación puede ser "extraordinariamente eficaz" pero para conseguir erradicar la enfermedad se necesitan mejorar las condiciones higiénicas de la población en riesgo de padecerla, es decir, los más desfavorecidos.
"La injusticia social también mata y en cuento consigamos mejorar todas las patas que rodean la enfermedad no la podremos controlar. Estamos ante la enfermedad social por excelencia y hay que trabajar paralelamente entre todos y de forma coordinada desde todos los ámbitos para controlarla", ha apostillado Hernández.
Una de las medidas para mejorar la prevención y tratamiento de la patología es la creación del Plan Nacional de tuberculosis, iniciativa que cuenta con la aprobación del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y que, según han pronosticado los responsables de la Red TBS, previsiblemente estará en marcha a finales de 2017, siempre y cuando se cuente con la financiación suficiente para llevarlo a cabo.
Finalmente, Ancochea ha solicitado a las autoridades sanitarias, además de aumentar la inversión y poner en marcha cuanto antes el plan nacional; reflexionar sobre las trabas que ha creado el Real Decreto 16/2012 en el acceso a los tratamientos por parte de los más necesitados; y garantizar la gratuidad de las terapias a los pacientes que más lo necesiten. "Los avances en los últimos años han sido limitados y creemos que hay que invertir más en tuberculosis y trabajar de forma conjunta", ha zanjado el presidente del Comité Científico de la Red TBS.