MADRID, 21 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha certificado que Belice está libre de malaria, tras más de 70 años de lucha del país centroamericano por erradicar la enfermedad.
Con el anuncio de este miércoles, un total de 42 países y 1 territorio han sido certificados como libres de malaria por la OMS, incluidos 11 países de la Región de las Américas.
Tras Paraguay, Argentina y El Salvador, Belice se ha convertido en el cuarto país de las Américas y el segundo de América Central en ser certificado libre de malaria en los últimos 5 años. Además, Belice es el tercer país al que se concede la condición de libre de malaria en 2023, tras Azerbaiyán y Tayikistán en marzo.
"La OMS felicita al pueblo y al gobierno de Belice y a su red de socios mundiales y locales por este logro. Belice es otro ejemplo de cómo, con las herramientas y el enfoque adecuados, podemos soñar con un futuro libre de malaria", ha celebrado a través de un comunicado el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
"Este es un logro extraordinario para Belice, y también servirá de inspiración para los demás países endémicos de las Américas", ha añadido el director de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Jarbas Barbosa.
En las últimas 3 décadas, Belice ha logrado una reducción drástica de su carga de malaria: de un pico de alrededor de 10.000 casos en 1994 a cero casos autóctonos en 2019.
Según la OMS, este éxito de Belice se ha basado en "una fuerte vigilancia de la malaria, el acceso al diagnóstico y métodos eficaces de control de vectores, incluidos mosquiteros tratados con insecticidas y fumigación de interiores con insecticidas". "Los trabajadores sanitarios comunitarios formados han desempeñado un papel vital en el diagnóstico y el tratamiento oportunos", apuntan.
En 2015, Belice reorientó su programa de malaria para centrarse más en mejorar la vigilancia entre las poblaciones de alto riesgo, lo que permite dirigir las intervenciones y los recursos disponibles a las zonas prioritarias.
Belice mantuvo los esfuerzos de vigilancia de la malaria durante la pandemia de COVID-19 y se esforzó por integrar los sistemas de vigilancia de la malaria y de COVID-19. Igualmente, la OMS señala que la colaboración transfronteriza con los países vecinos México y Guatemala "también ha sido clave para el éxito".
La certificación de eliminación del malaria se concede cuando un país ha demostrado que la cadena de transmisión autóctona del malaria por mosquitos 'Anopheles' se ha interrumpido en todo el país durante al menos los tres últimos años consecutivos.
Además, debe tener operativo un sistema nacional de vigilancia capaz de detectar y responder rápidamente a cualquier caso de malaria, junto con un programa eficaz para prevenir el restablecimiento de la enfermedad.
La decisión final sobre la concesión de la certificación de zona libre de malaria corresponde al director general de la OMS, tras la recomendación del Grupo Asesor Técnico independiente sobre la Eliminación y Certificación de la Malaria.