MADRID, 12 Jul. (EUROPA PRESS) -
La pérdida de dientes es un factor de riesgo para el deterioro cognitivo y la demencia, y con cada diente que se pierde el riesgo de deterioro cognitivo aumenta, según un nuevo análisis dirigido por investigadores de la Facultad de Enfermería Rory Meyers de la Universidad de Nueva York (NYU) y publicado en 'The Journal of Post-Acute and Long-Term Care Medicine' (JAMDA).
Sin embargo, este riesgo no fue significativo entre los adultos mayores con dentadura postiza, lo que sugiere que el tratamiento oportuno con dentadura postiza puede proteger contra el deterioro cognitivo.
Aproximadamente uno de cada seis adultos de 65 años o más ha perdido todos sus dientes, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos. Estudios anteriores muestran una conexión entre la pérdida de dientes y la disminución de la función cognitiva, y los investigadores ofrecen una serie de posibles explicaciones para este vínculo.
Por un lado, la falta de dientes puede provocar dificultades para masticar, lo que puede contribuir a las deficiencias nutricionales o promover cambios en el cerebro. Un número creciente de investigaciones también apunta a una conexión entre la enfermedad de las encías -una de las principales causas de la pérdida de dientes- y el deterioro cognitivo. Además, la pérdida de dientes puede reflejar desventajas socioeconómicas a lo largo de la vida que también son factores de riesgo para el deterioro cognitivo.
"Dado el asombroso número de personas a las que se les diagnostica la enfermedad de Alzheimer y la demencia cada año, y la oportunidad de mejorar la salud bucodental a lo largo de la vida, es importante comprender mejor la conexión entre la mala salud bucodental y el deterioro cognitivo", explica Bei Wu, doctora, profesora del Decanato de Salud Global en la Facultad de Enfermería Rory Meyers de la NYU y codirectora de la Incubadora de Envejecimiento de la universidad, así como autora principal del estudio.
Wu y sus colegas llevaron a cabo un meta-análisis utilizando estudios longitudinales sobre la pérdida de dientes y el deterioro cognitivo. En los 14 estudios incluidos en su análisis participaron un total de 34.074 adultos y 4.689 casos de personas con una función cognitiva disminuida.
Los investigadores descubrieron que los adultos con más pérdida de dientes tenían un riesgo 1,48 veces mayor de desarrollar deterioro cognitivo y un riesgo 1,28 veces mayor de ser diagnosticados con demencia, incluso después de controlar otros factores.
Sin embargo, los adultos con pérdida de dientes eran más propensos a tener deterioro cognitivo si no tenían dentadura postiza (23,8 por ciento) en comparación con los que tenían dentadura postiza (16,9 por ciento); un análisis posterior reveló que la asociación entre la pérdida de dientes y el deterioro cognitivo no era significativa cuando los participantes tenían dentadura postiza.
Los investigadores también llevaron a cabo un análisis utilizando un subconjunto de ocho estudios para determinar si existía una asociación "dosis-respuesta" entre la pérdida de dientes y el deterioro cognitivo; en otras palabras, si un mayor número de dientes perdidos estaba relacionado con un mayor riesgo de deterioro cognitivo. Sus resultados confirmaron esta relación: cada diente perdido adicional se asoció con un 1,4 por ciento más de riesgo de deterioro cognitivo y un 1,1 por ciento más de riesgo de ser diagnosticado con demencia.
"Esta relación 'dosis-respuesta' entre el número de dientes perdidos y el riesgo de disminución de la función cognitiva refuerza sustancialmente las pruebas que relacionan la pérdida de dientes con el deterioro cognitivo, y proporciona algunas pruebas de que la pérdida de dientes puede predecir el deterioro cognitivo", apunta Xiang Qi, candidato al doctorado de la NYU Meyers.
"Nuestros hallazgos subrayan la importancia de mantener una buena salud bucodental y su papel para ayudar a preservar la función cognitiva", dijo Wu.