MADRID, 28 May. (EUROPA PRESS) -
Durante milenios, la plata se ha utilizado por sus propiedades antimicrobianas y antibacterianas. Aunque su uso como desinfectante es ampliamente conocido, los efectos de la interacción de la plata con las bacterias no se conocen bien. Ahora, investigadores de Italia, Estados Unidos y Singapur han estudiado el impacto que tiene la interacción con las bacterias en la estructura de la plata y han comprobado que este material efectivamente ataca a las bacterias pero se "consume" en el proceso, según publican en la revista 'Chemical Physics Reviews'.
Dado que las bacterias resistentes a los antibióticos son cada vez más frecuentes, el uso de la plata ha aumentado considerablemente, por ejemplo en los revestimientos antibacterianos. Sin embargo, la compleja cadena de acontecimientos que conducen a la erradicación de las bacterias se da en gran medida por sentada, y una mejor comprensión de este proceso puede proporcionar pistas sobre la mejor manera de aplicarlo.
En el nuevo estudio, al controlar la interacción de las nanopartículas de plata con un cultivo cercano de 'E. coli', los investigadores descubrieron que la plata sufre varios cambios drásticos. Sobre todo, las células de 'E. coli' provocaron transformaciones sustanciales en el tamaño y la forma de las partículas de plata. Se suele suponer que la plata no se modifica en este proceso, pero el trabajo realizado por el equipo demuestra que no es así.
La interacción electrostática entre la plata y las bacterias hace que algunas de las partículas de plata se disuelvan al liberar iones para penetrar en las células bacterianas. Esta disolución modifica la forma de las partículas de plata, encogiéndolas y redondeándolas desde formas triangulares a círculos. Estos efectos son aún más pronunciados si las células de' E. coli' son pretratadas con una molécula para aumentar la permeabilidad de sus membranas antes de encontrarse con la plata.
De este estudio se desprende que la plata se "consume" en la interacción", afirma Guglielmo Lanzani, uno de los autores del trabajo y director del Centro de Nanociencia y Tecnología del IIT-Instituto di Tecnologia. Afortunadamente, es probable que este "consumo" no afecte a las propiedades antimicrobianas de la plata, porque el efecto es muy pequeño.
"Creemos que esto no afecta a la eficacia del proceso biocida y, debido al minúsculo intercambio de masa, el tiempo de vida es esencialmente ilimitado", afirma Giuseppe Patern, investigador del IIT y coautor del estudio. "Las modificaciones estructurales, sin embargo, afectan a las propiedades ópticas de las nanoestructuras metálicas".
Las investigaciones directas de este tipo de procesos son difíciles, porque los laboratorios son entornos controlados que no pueden captar plenamente las complejidades de un entorno biológico de células bacterianas.
No obstante, el grupo está planeando nuevos experimentos para explorar las vías químicas que conducen a los cambios estructurales de la plata. Esperan descubrir por qué la plata funciona mejor que otros materiales como superficie antibacteriana y por qué las membranas bacterianas son especialmente vulnerables a la plata, mientras que otras células se ven menos afectadas.