MADRID 30 Abr. (EUROPA PRESS) -
En un informe de caso publicado en la revista 'BMJ Case Reports', los médicos presentaron un diagnóstico sorprendente y sin precedentes: leucoencefalopatía tóxica por inhalación de fentanilo. En otras palabras, la inhalación de fentanilo provocó que grandes secciones de la materia blanca del cerebro del paciente se inflamaran hasta el punto de perder el conocimiento y correr el riesgo de perder irreversiblemente la función cerebral o posiblemente morir.
Los expertos médicos habían documentado casos anteriores causados ??por la inhalación de heroína, pero se cree que este paciente, denominado paciente OHSU, es el primer caso documentado que involucra la inhalación de fentanilo ilícito. El autor principal del estudio dice que debe tomarse como una advertencia sobre el peligro de una sustancia barata, fácilmente disponible y 50 veces más potente que la heroína.
"El uso de opioides, especialmente el fentanilo, se ha estigmatizado mucho", explica el autor principal Chris Eden, ahora residente de segundo año en medicina interna en la Facultad de Medicina de Universidad pública en Portland, Oregón (OHSU) en Estados Unidos, y que formó parte del equipo de tratamiento del paciente. "Este es el caso de un hombre de clase media, de unos 40 años, con hijos, que consumió fentanilo por primera vez. Demuestra que el fentanilo puede afectar a todos en nuestra sociedad".
Aunque este es el primer caso documentado, Eden comenta que es probable que otros casos simplemente no hayan sido reconocidos debido en parte al hecho de que se sabe relativamente poco sobre la fisiología del síndrome. Además, dijo que los hospitales tradicionalmente no han incluido el fentanilo en sus análisis de orina estándar. Al mismo tiempo, las sobredosis mortales y no mortales debidas al fentanilo y otros opioides son muy comunes.
"Conocemos muy bien los efectos secundarios clásicos de los opiáceos: depresión respiratoria, pérdida del conocimiento, desorientación", señala Eden. "Pero no pensamos clásicamente que cause un daño cerebral posiblemente irreversible y afecte al cerebro, como sucedió en este caso".
La resonancia magnética reveló inflamación en el cerebro. Sin embargo, la pérdida persistente de conciencia, memoria y función del paciente podría deberse a diversas causas: accidente cerebrovascular, exposición al monóxido de carbono o enfermedad metabólica, entre ellas. Al final, una prueba de drogas no estándar reveló la presencia de fentanilo en su organismo.
Afortunadamente para el paciente, se recuperó lentamente después de 26 días en el hospital, seguido de una estadía en un centro de enfermería especializada para ayudarlo a recuperar el habla y la función. Ahora está en casa con su familia en el área de Seattle y ha vuelto a trabajar. Hasta el día de hoy no recuerda el episodio.
El resultado exitoso implicó un tratamiento integral con numerosos médicos y apoyo en el centro de salud académico y en el hospital más grande de Oregon, todos operando con un enfoque centrado en el paciente.
"Este caso involucró a médicos de medicina interna, neurología, neurorradiología y cuidados paliativos, además de enfermeras, trabajadores sociales, planificadores de altas, fisioterapeutas, dietistas y farmacéuticos", finaliza Eden. "Estoy orgulloso de que estos equipos multidisciplinarios de OHSU trabajen juntos para atender a pacientes complejos, tanto desde una perspectiva médica como social", concluye.