OVIEDO 19 Abr. (EUROPA PRESS) -
El grupo de investigación dirigido por el bioquímico Carlos López-Otín en la Universidad de Oviedo ha logrado el 'ERC Advanced Grant', un programa europeo de apoyo a la investigación de vanguardia dotado con 2,5 millones de euros, para actuar sobre el envejecimiento molecular. El proyecto asturiano ha sido seleccionado junto a otros diez en España entre un total de 2.400 propuestas.
La investigación, presentada este miércoles en rueda de prensa por el investigador y el rector de la Universidad, Santiago García Granda, se centra en el envejecimiento y parte de la experiencia acumulada en el estudio del cáncer explorando "de manera amplia e integradora un problema universal y capital en Europa".
"Innovador y arriesgado", el proyecto abordará el envejecimiento en todas sus dimensiones. Lo primero que estudiará el equipo de López-Otín será cómo afectan a las células que se dañan el envejecimiento --defectos intrínsecos-- y las alteraciones que el envejecimiento produce en el genoma.
En una segunda fase se estudiarán los mecanismos sistémicos, referidos a la comunicación entre células dañadas, que se ve afectada también por el envejecimiento. En este punto ha agregado que, si el equipo encuentra las causas se podrían descubir formas de intervenir sobre ello, al ser "más fácil" intervenir en un proceso general sistémico que en cada célula.
Finalmente, en la última etapa tratarán de buscar formas de intervención basadas en pequeñas moléculas y utilizar modelos vivos de envejecimiento prematuro --ratones--, para hacer el experimento.
Para todo ello emplearán técnicas "innovadoras" de estudio, con métodos de análisis genómico, epigenómico y las dimensiones moleculares que se miden en cualquier enfermedad o problema biológico. También buscarán procedimientos en modelos biológicos vivos con el fin de lograr una "longevidad saludable" y poder actuar, en un futuro, sobre las enfermedades asociadas al paso del tiempo.
LA AYUDA ES "EL MAYOR RECONOCIMIENTO" PARA LA UNIVERSIDAD
El rector, por su parte, ha celebrado que el equipo de investigadores haya logrado este reconocimiento, al ser la primera vez que la institución académica lo recibe y por los beneficios que traerá a la Universidad tanto en capacidad de contratación de nuevos investigadores, retención de talentos y en prestigio.
Del total de los 2,5 millones de euros, aproximadamente el 21 por ciento repercutirá directamente en la Universidad. Del reconocimiento también se beneficiarán otros grupos de investigación de la Universidad, el Instituto de Investigación Sanitaria (Iispa), y empresas del sector que podrán colaborar en el proyecto, de una duración estimada de 6 a 7 años.
Para López-Otín este reconocimiento "muy importante" supone un relevante símbolo para la Universidad, al ser un "parámetro fundamental" para medir la posición de las universidades y centros de investigación. "Es casi imposible que lo reciban las universidades", ha asegurado, por la escasez de recursos.
Al obtener esta ayuda, considera el bioquímico que su consecución "es muy importante para Asturias". "Es un mensaje de que no está todo perdido, estamos convencidos de que vamos a salir adelante en este periodo de grandes dificultades", ha señalado.
Esta es la primera vez que su equipo se presenta para lograr el reconocimiento del Consejo Europeo de Investigación (ERC) y, tras hacerlo con éxito, López-Otín ha manifestado su intención de continuar su trabajo en Asturias, para "enriquecer" a la institución académica. "Esta es la prueba de que la investigación no cuesta dinero, sino que trae recursos", ha subrayado.
El reconocimiento se suma a la aportación obtenida a través del mismo programa --pero en la categoría 'Starting Grants' y por 1,5 millones de euros-- el pasado mes de noviembre por el equipo del físico Pablo Alonso sobre cómo reducir el tamaño de la luz para controlarla a pequeña escala.