MADRID, 8 Ago. (EUROPA PRESS) -
El uso de quimio-inmunoterapia antes de cirugía en estadios intermedios de cáncer de pulmón eleva un 20 por ciento la supervivencia, según los resultados de un estudio del estudio 'NADIM II', realizado por el Grupo Español de Cáncer de Pulmón (GECP), que se presentan este lunes en el marco de la celebración del Congreso Mundial de Pulmón IASLC 2022 World Conference on Lung Cancer.
El nuevo análisis de 'NADIM' aporta ahora datos de supervivencia global y supervivencia libre de progresión (sin que el tumor vuelva a desarrollarse) y que confirman los grandes beneficios de tratar los estadios intermedios con quimio-inmunoterapia (nivolumab), antes de someterlos a una cirugía.
"'NADIM II' confirma la superioridad de esta combinación en casos con tumores potencialmente operables, estadio IIIA-B. Se trata de un grupo heterogéneo de pacientes, muchos de ellos con enfermedad no metastásica, pero con tumores de gran volumen, que con la combinación de quimioterapia más nivolumab logran no sólo que se reduzca, sino que en muchos casos desaparezca la enfermedad", ha comentado el presidente del GECP e investigador principal, Mariano Provencio.
De hecho, los datos del estudio reportan que un 36,8 por ciento de los pacientes logran una reducción completa del tumor, frente al 6 por ciento que lo hace con el enfoque tradicional (quimio tras cirugía). También es mayor la tasa de respuesta objetiva global (reducción o desaparición del tumor), ya que con quimio-inmunoterapia respondieron el 75,4 por ciento de los pacientes, en comparación con el 48,2 por ciento en el grupo control.
UN 20% MÁS DE SUPERVIVENCIA
Los nuevos análisis de 'NADIM II', que reclutó 86 pacientes procedentes de veinte centros hospitalarios españoles, destacan que, además de la reducción tumoral, los pacientes tratados con quimio-inmunoterapia tienen mayor supervivencia. "A los dos años, un 84,7 por ciento de los pacientes tratados en 'NADIM II' con quimio-inmunoterapia sigue vivo, frente al 63,4 por ciento de la rama tratada únicamente con quimioterapia", detalla Provencio.
Además, con el nuevo esquema, un 66 por ciento de los pacientes sobrevivió sin que el tumor volviera a progresar a lo largo de 24 meses, frente al 44 por ciento de la rama a la que se le administró el tratamiento tradicional.
Este enfoque de tratamiento, además, permitiría elevar el número de pacientes que finalmente pueden ser operables: el 93 por ciento de los pacientes del grupo de terapia combinada se sometieron a cirugía después del tratamiento, en comparación con el 69 por ciento de la otra rama.
"Es posible que más personas se operen con este enfoque porque este tratamiento es más efectivo para reducir el tamaño del tumor, sin agregar mucha toxicidad", remacha el doctor Provencio.
Con los datos de NADIM II, el GECP confirma finalmente que la quimio-inmunoterapia antes de cirugía reporta mejoras significativas. "No estamos hablando de un fármaco únicamente. Hablamos de un cambio en el abordaje y la estrategia terapéutica que implica a muchos profesionales: patólogos, cirujanos, oncólogos o radioterapeutas. Hemos encontrado una mejora significativa que puede encaminarnos a la cura de un gran número de estos pacientes después de décadas sin avances", asegura Provencio.
Para el presidente del GECP, "estos datos contribuyen en gran medida a establecer un único estándar de abordaje de la enfermedad operable en estadio III, que aporta grandes beneficios". "Este esquema de tratamiento ya fue aprobado por un procedimiento especial por la FDA y se encuentra disponible en centros hospitalarios norteamericanos. Esperemos que Europa y, por ende, España, sigan este camino porque sin duda es un claro beneficio para pacientes con un tumor de alto impacto", añade.