MADRID, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -
El oftalmólogo de la Clínica Baviera, el doctor Fernando Llovet, advierte de que, con motivo de la temporada de invierno, el reflejo de la luz del sol en la nieve potencia los efectos de una exposición prolongada a la radiación ultravioleta pudiendo causar quemaduras en la superficie del ojo y fotoqueratitis.
La ceguera de la nieve, un tipo de fotoqueratitis, es un problema visual generado por los rayos ultravioleta procedentes del sol. Debido a que la nieve refleja un 80 por ciento más la radiación ultravioleta que otras superficies, el doctor Fernando Llovet señala que "el sol puede quemar los ojos al igual que hace con la piel", dañando la capa superficial de la córnea y la conjuntiva, así como el interior del párpado.
Asimismo, el doctor Llovet asegura que a mayor altitud, "que es donde se suelen practicar estos deportes", más delgada es la capa de la atmósfera y, por ende, se reduce la filtración de la radiación UV. El oftalmólogo aconseja usar "las gafas de filtro de categoría 4, que es una lente muy oscura que absorbe el 82 y 92 por ciento de la luz y son las más adecuadas para sol extremo como el de la nieve", además de proteger del viento.
El experto, además del uso de gafas homologadas, recomienda llevar sombreros, gorras o viseras; hacer descansos a la sombra y emplear protector solar también en el contorno de los ojos y párpados para evitar sufrir la ceguera de la nieve.
Algunos de los síntomas que pueden producirse como consecuencia de la exposición al sol durante la práctica de esquí, snowboard u otros deportes de nieve pueden ser enrojecimiento, dolor, hinchazón, visión borrosa, sensibilidad a la luz, sensación arenosa, inflamación de la conjuntiva e incluso dolores de cabeza y pérdida temporal de la visión.
En caso de notar molestias tras la práctica de deportes en la nieve, los expertos de Baviera aconsejan evitar la radiación solar e incluso aislarse en una habitación oscura. Además, si se es usuario de lentillas, es conveniente quitárselas para evitar una mayor irritación. "También puede resultar de ayuda colocar un paño frío sobre los ojos cerrados, usar lágrimas artificiales y no frotarse los ojos", recomienda el doctor Llovet.