MADRID 20 Dic. (EUROPA PRESS) -
Cuando los pacientes se someten a cualquier tipo de cirugía después de haber tenido COVID, sus probabilidades de problemas postoperatorios significativos disminuyen con el tiempo transcurrido desde el diagnóstico de COVID, según un estudio investigadores del Centro Médico de la Universidad de Vanderbilt (Estados Unidos) publicado en la revista 'JAMA Network Open'. Según han comprobado, esta tendencia a la disminución del riesgo persiste durante más tiempo del conocido hasta ahora, hasta 13 meses después de la operación.
Los investigadores utilizaron datos de registros electrónicos de salud de 3,997 pacientes quirúrgicos adultos con antecedentes de infección por SARS-CoV-2 que se sometieron a cirugía desde marzo de 2020 hasta diciembre de 2021. El tiempo desde el diagnóstico de COVID hasta la cirugía fue una mediana de 98 días.
El equipo analizó las probabilidades compuestas de varios problemas cardiovasculares dentro de los 30 días posteriores a la cirugía: trombosis venosa profunda, embolia pulmonar, accidente cerebrovascular, lesión miocárdica, lesión renal aguda y muerte.
La incidencia de este resultado compuesto a los 30 días descendió bruscamente al principio, de aproximadamente el 18% al 10% durante los primeros 100 días tras el diagnóstico de COVID. A continuación, disminuyó de forma constante durante los 10 meses siguientes, hasta alcanzar aproximadamente el 8% a los 400 días del diagnóstico de COVID. La tasa de disminución del riesgo no se vio afectada por el estado de vacunación contra COVID-19 de los pacientes.
"En comparación con estudios poblacionales anteriores sobre este tema, el nuestro se distingue por hacer un seguimiento más amplio de los resultados quirúrgicos y por utilizar un horizonte temporal más largo a partir del diagnóstico de COVID", señala Robert Freundlich, profesor asociado de Anestesiología e Informática Biomédica, quien dirigió el estudio con el becario de medicina de cuidados críticos John Bryant.
"Cuando estábamos a mitad de nuestro estudio, basándose en los resultados pulmonares postoperatorios, una sociedad médica emitió una recomendación para retrasar la cirugía después de COVID-19 hasta 12 semanas en los casos más graves de COVID --recuerda Freundlich--. Mientras tanto, con respecto a esta gama de problemas cardiovasculares, en nuestros datos nos sorprendió encontrar una tendencia de disminución del riesgo aún perceptible más de un año después del diagnóstico de COVID".
"En el caso de un paciente determinado, son muchas las consideraciones que pueden influir en el momento más adecuado para la intervención quirúrgica, y nuestros resultados proporcionan un indicio más de que médicos y pacientes harían bien en incluir la proximidad del COVID en sus reflexiones", concluye.