MADRID, 4 Oct. (EUROPA PRESS) -
Investigadores de la Universidad Queen Mary de Londres y de la Universidad de Nottingham, ambas en Reino Unido, han realizado un estudio sobre casi 600.000 personas que muestra que el riesgo de suicidio en los primeros tres meses después de un diagnóstico de demencia para pacientes menores de 65 años es casi 7 veces mayor que en pacientes sin demencia.
El equipo realizó un estudio de casos y controles basado en la población de los registros médicos de 2001 a 2019 para determinar si había una relación entre el diagnóstico de demencia y el riesgo de suicidio.
Los investigadores descubrieron que casi el 2% de los pacientes con diagnóstico de demencia murieron por suicidio. Los resultados mostraron que los pacientes tenían un alto riesgo de suicidio después de un diagnóstico de demencia si tenían menos de 65 años, durante los primeros tres meses después del diagnóstico o si tenían una enfermedad psiquiátrica conocida.
El reconocimiento precoz y un diagnóstico preciso y a tiempo de la demencia, junto con el apoyo de especialistas, son factores de gran importancia para reducir la angustia causada por un diagnóstico de inicio joven.
El doctor Charles Marshall, autor principal y profesor titular de clínica y neurólogo consultor honorario del Instituto Wolfson de Salud de la Población de Queen Mary, advierte de que "mejorar el acceso al diagnóstico de la demencia es una importante prioridad sanitaria. Sin embargo, un diagnóstico de demencia puede ser devastador, y nuestro trabajo muestra que también necesitamos asegurar que los servicios tengan los recursos para proporcionar el apoyo apropiado después de que se dé el diagnóstico", añade.
Por su parte, la doctora Danah Alothman, autora principal e investigadora de la Universidad de Nottingham, resalta que "estos resultados sugieren que las clínicas de la memoria deberían orientar especialmente la evaluación del riesgo de suicidio a los pacientes con demencia de inicio joven, a los pacientes en los primeros meses tras el diagnóstico de demencia y a los pacientes que ya se sabe que tienen problemas psiquiátricos".