MADRID, 4 Abr. (EUROPA PRESS) -
Ante la llegada de la primavera, el doctor Julio Maset, médico de Cinfa, ha advertido de la importancia de distinguir entre los síntomas de resfriado y alergia, ya que esta última se caracteriza por síntomas no presentes en el resfriado, como el picor de garganta y de nariz y el lagrimeo de ojos.
Sin embargo, los resfriados comunes son infecciones respiratorias causadas por virus. Se caracterizan normalmente por estornudos, tos, mucosidad abundante, congestión nasal con moco fluido y dolor de garganta. También suele haber malestar y cansancio leve o moderado. La fiebre es poco frecuente y, si aparece, es baja.
"Otra diferencia respecto a los catarros es que no hay dolores, fiebre o malestar, si bien la fatiga y la tos sí pueden presentarse ocasionalmente, especialmente si hay asma alérgica", señala el doctor Maset.
OBSERVAR CUÁNDO APARECEN Y CUÁNTO DURAN
Sin embargo, no solamente los síntomas brindan la clave para diferenciar entre una alergia y el resfriado; el momento de aparición y su duración pueden también ayudar a distinguirlos. El resfriado suele resolverse en una semana o diez días. En cambio, la alergia durará todo el tiempo que permanezca el alérgeno en el ambiente; a menudo, semanas o incluso meses, como suele ocurrir en primavera con el polen.
"Precisamente, en esta época del año es cuando más debemos observar si esos síntomas que creemos catarrales se agudizan cuando salimos al exterior. Si eso ocurre, es probable que se trate de una alergia al polen", advierte el médico de Cinfa.
A la hora de tratar ambas afecciones, las medidas también son distintas. Ante un resfriado, consisten en reposo, tomar abundantes líquidos para una rehidratación adecuada y, si es necesario, el uso de analgésicos y/o descongestivos nasales que ayuden a mitigar las molestias. El tratamiento de la alergia puede incluir igualmente el uso de descongestivos, pero se basa en controlar los síntomas mediante antihistamínicos, que deben ser pautados por un especialista en alergología.
No obstante, como subraya el experto de Cinfa, la primera medida y la más eficaz contra la alergia es evitar el contacto con el alérgeno, en este caso, el polen. "Para lograrlo, podemos seguir precauciones como evitar salir al exterior los días en que aumente su concentración en el aire y, cuando se salga, hacerlo con la mascarilla puesta".
Además, la mascarilla también podrá ayudar a reducir el riesgo de resfriado, además de otras medidas como el lavado de manos con frecuencia, evitar los ambientes fríos y/o húmedos y tomar muchas frutas y verduras para fortalecer las defensas.
CONSEJOS PARA PREVENIR LA ALERGIA AL POLEN ESTA PRIMAVERA
Así las cosas, Maset proporciona una serie de consejos para prevenir la alergia al polen esta primavera, que afecta a 8 millones de personas en nuestro país, según la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC).
En primer lugar, aconseja estar dentro de casa en los días de mayor concentración de polen y, sobre todo, durante los días de fuerte viento. En este sentido, los intervalos entre las cinco y las diez de la mañana y las siete y diez de la noche son los que acumulan una mayor concentración de polen. Por esta razón, se debe reducir durante esos tramos horarios las actividades al aire libre y mantener las ventanas de casa cerradas.
Además, llevar la mascarilla, especialmente FFP2, en el exterior ayudará a minimizar la exposición al polen del aparato respiratorio y, por tanto, a reducir los síntomas. Maset también aconseja llevar gafas de sol para minimizar el contacto de los ojos con el polen. De esta manera, se reducirán síntomas como el lagrimeo y el picor en ellos.
Durante los desplazamientos en coche, es recomendable mantener las ventanillas cerradas para evitar que los granos de polen penetren en él. Tampoco está de más colocar filtros antipolen en los aparatos de aire acondicionado, tanto en casa como en el vehículo, sin olvidar cambiarlos con frecuencia.
Por otro lado, según advierte el médico de Cinfa, "la ropa es un imán para el polen". "Los granos de este alérgeno pueden quedarse atrapados en la ropa y en el cabello, por lo que una buena medida es ducharse y cambiarse al llegar a casa", explica, para insistir en la importancia de evitar tender la ropa en el exterior, sobre todo, al llegar la primavera.
También es preciso evitar aquellas actividades que puedan remover partículas de polen como cortar el césped o barrer la terraza. En caso de alergia al polen de gramíneas, tampoco es recomendable tumbarse ni practicar deporte sobre el césped.
Por otro lado, en caso de pasar la noche al aire libre, es mejor no dormir cerca de fuentes de pólenes alergénicos como árboles o plantas. Tampoco sería recomendable una siesta junto a estas especies.
Otro consejo del doctor es consultar al farmacéutico. Si se toman medicamentos específicos para las alergias como antihistamínicos, se debe hacer siempre bajo supervisión médica, de forma regular y en la dosis recomendada por el especialista. "Recuerda además que nunca debes mezclar estos medicamentos con alcohol. Si tienes cualquier duda, pregunta a tu farmacéutico", insiste.
Finalmente, anima a consultar el estado del aire antes de salir a la calle. Existen múltiples webs, como la página 'Polenes.com' de la SEAIC, donde es posible consultar la concentración del polen de determinadas plantas en la zona de residencia y la previsión para esos días, con el fin de planificar las salidas y las medidas a seguir.