¿Cómo saber que mi voz no está bien? Signos de que hay un problema

VOZ, GRITAR
GETTY IMAGES/ISTOCKPHOTO / SIPHOTOGRAPHY
Publicado: martes, 2 enero 2018 8:07

   MADRID, 2 Ene. (EDIZIONES) -

   A diferencia de otras partes del cuerpo en donde el dolor es una alarma, las cuerdas vocales no duelen. Entonces ¿cómo saber que nuestra voz no va bien? Cualquier cambio en los parámetros del sonido de la voz (altura, intensidad y timbre) es un signo inequívoco de que a nuestra laringe algo malo le pasa.

   Así lo asegura en una entrevista con Infosalus la logofoniatra del Hospital Quironsalud San José de Madrid, Judith Wuhl de Carli, quien alerta también de aquellos momentos determinados a partir de los cuáles sólo podemos hablar en un tono fuerte o en uno muy suave, o la voz comienza a estar más aguda o más grave que lo habitual.

   "También, por ejemplo, cuando se nos entrecorta y notamos que la última parte de la palabra u oración no se nos escucha y nos falta el aire. A su vez, un dato a tener en cuenta es cuando la gente empieza a no reconocerme a través del teléfono. Todo esto tiene valor clínico, fuera de un catarro, ya que en los catarros la voz nos cambia (voz nasal, gangosa a veces gutural) pero al ser un proceso agudo tiene un principio y un fin", señala la especialista.

   Así, destaca que cualquier inflamación o alteración anatómica en las cuerdas vocales producirá una voz patológica. En las alteraciones vocales más comunes, las que más visitan las consultas de los rehabilitadores y otorrinolaringologos son aquellos trastornos por uso y abuso vocal. "Lo primero que sentimos es el aumento del esfuerzo, el cansancio a la hora de hablar y a veces hasta dolor de garganta, casi como si fuera una faringitis", precisa la doctora Wuhl.

   Igualmente, indica que puede aumentar la tensión en la musculatura del cuello, en la musculatura pectoral, en la nuca, o en la musculatura del suelo de la boca (zona de la cococha en la merluza). "Algunos pacientes me refieren que se ahogan al hablar. Esto es por la incoordinación fonorespiratoria. Seguramente esto va pasando gradualmente, pero no escuchamos la queja de nuestra laringe", añade.

MALOS USOS DE LA VOZ

    "Por ejemplo si fui a una boda y al día siguiente mi voz está ronca, o incluso sólo cansada pero con más sensación de esfuerzo para hablar, debo de forzar la hidratación (beber al menos 2 litros de agua) y hacer reposo vocal", alerta la logofoniatra.

   Pero, ¿qué significa hacer reposo vocal? Wuhl explica que implica estar en silencio o limitar mucho el uso de la voz, "y por supuesto no hacer llamadas telefónicas". "¿Qué pasaría si en vez de volver ronco, en esa boda me tuerzo un pie un pie?¿Qué haría?¿Iría a correr? Seguramente haría reposo con el pie en alto. ¿Por qué con la voz no somos igual de cuidadosos?", se pregunta.

   A su juicio, es por ello importante saber que tener la voz ronca es un signo acústico de inflamación a de las cuerdas vocales. "Éstas no duelen y es cierto que eso es un problema a la hora de cuidarlas", apostilla.

   A su vez, rechaza ciertas conductas fonatorias, "que son agresivas", como el grito o hablar fuerte. Eso sí, la experta avisa de que un grito es un traumatismo a las cuerdas vocales que puede producir una lesión casi instantánea. "Hay profesiones que utilizan los gritos o hablar fuerte, o cambios muy abruptos en las inflexiones de voz, como los periodistas deportivos, animadores, profesores, o actores. Ellos deben aprender a realizarlo y a gestionar las gamas de tono de voz. Para eso se va a un experto en la voz", incide la doctora.

EL PELIGRO DE FUMAR

   Asimismo, alerta de que fumar tiene una relación muy estrecha con el cáncer y el envejecimiento celular. "Es común reconocer la voz de una fumador, incluso sin lesión cancerígena. Suele ser ronca, significativamente grave, tanto a veces que cuesta diferenciar el sexo de la persona. Esto se debe a que la laringe cursa laringitis crónicas o edemas en todo el tejido de la cuerda vocal", explica.

   "Para hacernos una idea, la cuerda vocal de mujer puede medir 1 centímetro de longitud. Si una lesión nodular (que en su inicio es mucho más pequeña que un grano de arroz) produce ronquera y mucha discapacidad vocal, pensad la aberración vocal que se produce cuando la inflamación es en toda la superficie y en el cuerpo de las cuerdas vocales", subraya la otorrinolaringóloga.

   Finalmente, la especialista llama la atención sobre cuidar la laringe con bebidas o alimentos fríos o calientes. "La mucosa cambia de coloración y por lo tanto se inflama. Esto afecta a la propagación del sonido. Por eso, otra forma de cuidar nuestra laringe es cuidar las temperaturas de nuestras bebidas", sentencia la doctora Wuhl.