MADRID, 18 Mar. (EDIZIONES) -
Son varias las voces de expertos que están pidiendo que se vuelvan a alargar las cuarentenas de 10 a 14 días frente a la variante británica, porque podría ser que la carga viral se mantiene alta durante más días en ésta.
El detonante fue hace apenas un mes un estudio de la Universidad de Harvard, que todavía no ha sido revisado por pares (preliminar), que señalaba que la variante británica puede infectar durante más días, de los 8 de media que se cree que dura el virus de la COVID-19 original.
En una entrevista con Infosalus, la doctora María del Mar Tomás, portavoz de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC) advierte en este sentido que por el momento es el único estudio que plantea esta situación, y en él se han verificado 7 casos de pacientes. "Realmente al ver las gráficas se aprecia que en apenas un par de casos hay carga viral infectiva más allá de los 10 días", subraya la especialista.
Con solo un estudio hasta el momento y la información que disponemos de la variante británica dice que no podemos cambiar los periodos de cuarentena actuales de 10 días. "De esta forma se controla bien usando las medidas preventivas (mascarilla, distancia, higiene, ventilación de espacios cerrados). La cuarentena de los 10 días para los pacientes con una buena evolución clínica es suficiente", asegura la especialista.
Dice también que la variante británica "previsiblemente sea más transmisible" pero esto no quiere decir que tenga un periodo de incubación más alto: "Por ahora no han salido más estudios sobre esto. De volver a cambiar las cuarentenas habría que tener más evidencia científica. Con la de ahora no es necesario al 100% que haya que cambiar otra vez las cuarentenas y ampliarlas a 14 días, como algunos solicitan".
Cuando se tomó la decisión de los 10 días, según recuerda la doctora Tomás, sí había varios trabajos publicados (hasta una treintena) que constataron que en los pacientes inmunocompetentes donde la carga viral era tan baja en el día 10 no son contagiosos, y a partir del 14 producen anticuerpos G (fase final de la infección).
"Solo ha salido este trabajo de Harvard, no revisado por pares, por lo que sería necesario tener más evidencia científica para tomar una medida tan importante como está. Otra cosa son los pacientes hospitalizados, con peor evolución, y que sí pueden presentar la suficiente cantidad viral para contagiar más allá de los 10 días. Pero por eso están ingresados, y necesitan un tratamiento adecuado a su estado de salud", aclara la portavoz de la SEIMC.
Esta doctora recuerda que en Inglaterra, donde es predominante la variante británica, ha habido muchas variaciones constantes a nivel social, y las cuarentenas pasaron de 7 a 10 días. En Alemania apunta que la cuarentena pasó a 7 días, mientras que en España la hemos rebajado de 14 a 10. "Quedarnos en 10 es lo perfecto a día de hoy por los estudios antes comentados. Sí hay evidencia científica de que a los 10 días aquellos pacientes con una buena evolución clínica e inmunocompetentes presentarían una baja carga viral y no serían contagiosos", agrega la doctora Tomás.
POR QUÉ SE ACORTARON LAS CUARENTENAS A 10 DÍAS
Desde la Sociedad Española de Inmunología, la doctora Yvelise Barrios recuerda a Infosalus que las cuarentenas en España se rebajaron a 10 días porque al principio se hacía PCR antes y después de dar el alta, y con todos los datos recabados quedó claro que tras ese periodo el individuo no contagiaba.
Por su parte, Juan González del Castillo, coordinador del grupo de Enfermedades infecciosas de la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (SEMES), y jefe de Urgencias del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, recuerda que la PCR es una prueba "muy sensible", de forma que cualquier traza del virus que se encuentre en la muestra hará que ésta sea positiva. "Esto no significa que sea virus viable y capaz de producir enfermedad o contagio, pueden ser restos y no virus viable", aclara.
De hecho, remarca que las PCR pueden persistir positivas durante mucho tiempo, incluso semanas, pero por eso mantiene que al realizarse los cultivos se notificó que el virus no era viable, es decir, que no podía infectar a nadie.
El miembro de SEMES apunta también a que algún estudio científico ha constatado igualmente que la duración media de eliminación del virus es de 8 días, situándose la media global de la infección por COVID en 13 días y la mediana (lo más frecuente) en 16 días.
"Basados en estos artículos son varios los profesionales que están planteando si realmente sería necesario ampliar esa cuarentena para pacientes de la variante británica, dado que podría ser transmisible durante más tiempo, al persistir durante más tiempo en la nasofaringe. Estos estudios preliminares apuntan en esta dirección y se superan esos 10 días de cuarentena. Son pocos los estudios y pacientes que se han estudiado y esto nos lleva a hacernos esta pregunta de si alargar o no más las cuarentenas, aunque falta evidencia científica para tomar la decisión", añade.
Desde la Sociedad Española de Epidemilogía, la doctora Ángela Domínguez, coordinadora del Grupo trabajo de vacunas sostiene que si se demuestra que en la variante británica dura más el periodo de transmisión habría que pensar quizá en alargar los aislamientos, si bien considera que falta más información contrastada al respecto.
"En principio, ante la duda, cuanto más tiempo tengas aislada a una persona con una variante mejor será porque menos riesgo de que pueda circular libremente el virus e infectar a varias personas habrá", mantiene la doctora Domínguez.
El portavoz de SEMES apunta en este sentido que en estos momentos donde se está viendo que hay más contagios en Urgencias es sobre todo en pacientes ancianos con fragilidad. "Llegan al hospital menos jóvenes de los que vemos cuando la incidencia se dispara. Ahora que se ha estabilizado, hay sobre todo pacientes ancianos", resalta.
En este punto, el doctor González del Castillo hace hincapié en la importancia de ser estrictos en el cumplimiento de las cuarentenas de cara a evitar contagios intrafamiliares, donde se están produciendo el 80% de los casos, según apunta.