MADRID, 1 Dic. (EDIZIONES) -
En esta temporada de frío estamos viendo un gran número de infecciones respiratorias. Siempre con los cambios de temperatura circulan más los microorganismos y aparecen casos de forma más frecuente. Si a esto le añadimos los espacios cerrados por el frío y las reuniones de más personas, tenemos el trío perfecto para que se produzcan este tipo de infecciones respiratorias.
"Estos años, con la utilización de mascarillas y el aislamiento social se habían dado menos casos", explica en una entrevista con Infosalus el doctor José Miguel Rodríguez González-Moro, jefe de Servicio de Neumología del Hospital Universitario Príncipe de Asturias (HUPA).
Centrándonos en las neumonías, objeto de estudio de este artículo, este experto reseña que se trata de una infección del pulmón de tipo bacteriano, vírico o por otro microorganismo. Estas pueden cursar de forma leve, o bien de forma más grave e incluso necesitar de un ingreso en una unidad de cuidados intensivos.
"Bacterias y virus son responsables de más del 80% de los casos", puntualiza este neumólogo, al tiempo que señala que estas infecciones pueden ocurrir en el medio ambulatorio (comunidad), en el hospital, o bien en las unidades de cuidados intensivos.
"La gravedad dependerá del lugar de adquisición y de la situación y enfermedades previas que tenga el paciente que la sufre. Cada vez se ven más neumonías en pacientes inmunodeprimidos, por efecto de enfermedades como el sida o tumores en tratamiento quimioterápico", reconoce este doctor.
PRINCIPALES SÍNTOMAS DE LA NEUMONÍA
Fiebre, tos, expectoración dolor torácico, falta de aire, y escalofríos son los principales síntomas a los que se enfrenta una persona con esta infección respiratoria, detalla el jefe de Servicio de Neumología del Hospital Universitario Príncipe de Asturias (HUPA).
"Puede ser difícil distinguir de una gripe, sobre todo porque pueden ser la complicación de la misma", agrega este experto. Además, considera el doctor Rodríguez que el pronóstico mejora cuanto más rápido se realiza el diagnóstico y se inicia el tratamiento antibiótico.
CÓMO PODEMOS PREVENIRLAS
En cuanto a su prevención, dice que existen vacunas como la de la gripe, que de forma indirecta disminuyen el riesgo, y la del neumococo, que protege frente a unas determinadas cepas.
Aparte de estas medidas apunta a no fumar, a la necesidad de mantener una dieta equilibrada, a la realización de ejercicio físico, la idoneidad de evitar cambios bruscos de temperatura, así como aglomeraciones, al tiempo que mantener una buena higiene de manos.
Sobre su tratamiento, apunta el doctor Rodríguez directamente a los antibióticos y, en el caso de virus u hongos, con medicamentos más específicos. "No olvidar medidas generales como antitérmicos, o hidratación entre otras", asegura.
Aquí destaca que son especialmente preocupantes las neumonías en los niños, en los ancianos, así como en las personas inmunodeprimidas. En última instancia, este neumólogo recuerda que la mayor parte de las neumonías adquiridas en la comunidad en personas sanas (sin factores de riesgo) pueden tratarse en el domicilio bajo control del médico de Atención Primaria.
"Sí es necesario realizar una primera valoración clínica y radiológica y, en función de la misma, decidir el lugar de tratamiento. Es muy importante hacer un seguimiento, que puede incluso ser telefónico, y vigilar la aparición de posibles complicaciones", concluye el doctor José Miguel Rodríguez González-Moro, jefe de Servicio de Neumología del Hospital Universitario Príncipe de Asturias (HUPA).