MADRID, 17 Dic. (EDIZIONES) -
Lavarse correctamente los dientes implica cepillarse también las encías. Es un básico del que habitualmente nos olvidamos, según lamenta la periodoncista e implantóloga Ana Echeverría Manau, durante una entrevista con Europa Press Infosalus.
"Un correcto cepillado debe abordar la prevención de las dos enfermedades más frecuentes de la cavidad oral, que son la caries, y las enfermedades de las encías, o enfermedades periodontales. Cuando el paciente se cepilla debe hacerlo teniendo en cuenta que las bacterias que causan cada una de estas enfermedades viven en espacios distintos de la boca", remarca la también directora de la revista Cuida tus Encías, y miembro de Sociedad Española de Periodoncia y Osteointegración (SEPA).
Es por esto que un correcto cepillado, según prosigue, debe abordar toda la superficie del diente para evitar la caries, pero también debe entrar en contacto con el espacio en el cual la encía se encuentra con el diente: "Este punto, que se llama 'límite amelocementario', es crucial, ya que supone el peaje de entrada de las bacterias desde fuera de la boca hasta dentro de la encía, donde ya no son accesibles para el cepillado y, por lo tanto, pueden provocar la destrucción del hueso que soporta el diente".
CÓMO CEPILLARNOS CORRECTAMENTE
Así, la periodoncista Ana Echeverría Manau indica que el cepillado dental debe hacerse con un cepillo de consistencia media idealmente. "Debe llevarse a cabo dos veces al día cómo mínimo, y añadir una tercera vez, en caso de ser un paciente con riesgo alto de caries", agrega.
Sostiene igualmente que debe seguirse un orden concreto, a poder ser siempre el mismo: "Una vez empezamos el cepillado debemos procurar abarcar tanto la corona dental (para prevenir la aparición de caries), como el espacio en el que el diente se encuentra con la encía (para prevenir la enfermedad periodontal). La colocación del cepillo debe ser en un ángulo de 45° respecto a la encía. Como si quisiéramos que los pelos de cepillo entran dentro de la misma".
EL PELIGRO DE CEPILLAR LAS ENCIAS CON FUERZA
No obstante, esta especialista de SEPA advierte de que es muy importante tener en cuenta que cepillarse demasiado flojo o demasiado fuerte es malo para las encías. "En el primer caso, porque al hacerlo muy flojo, o con cepillos blandos, no hacemos la fuerza mecánica necesaria para poder arrastrar la placa; y en el segundo, porque generamos un daño a la encía de manera que tiende a retraerse", agrega.
En este sentido, subraya que los cepillos eléctricos con control de presión son útiles, aunque su recomendación, tal y como plasma, es que el paciente sea capaz de cepillarse adecuadamente con un cepillo manual, independientemente de si después considera que le es más útil el eléctrico.
CONSEJOS PARA UNAS ENCÍAS SANAS
Con todo ello, Ana Echeverria remarca que todo aquel paciente que quiera tener las encías sanas lo primero que debe de hacer es cepillarse los dientes dos veces al día con los cepillos adecuados y la técnica adecuada. "En caso de que la técnica de cepillado genere algún tipo de dudas sería conveniente acudir al dentista de confianza para que le enseñen a hacerlo adecuadamente", subraya.
Otro aspecto imprescindible, en su opinión, es realizar al menos una limpieza profesional al año: "Esta limpieza, para que se considere suficiente, debe incluir unos minutos de refuerzo de higiene oral junto a su higienista, la limpieza propiamente dicha, que debe durar 40 minutos mínimo, y finalmente colocar flúor tópico en el tazón de pacientes con riesgo de caries".
En cuanto a los hábitos, mantiene la miembro de SEPA que el tabaco es el principal enemigo de las encías. "Es muy importante que el paciente revise su salud general, ya que esta está íntimamente ligada a su salud oral", tal y como destaca.
En último lugar, llama la atención sobre el hecho de que muchas veces el paciente olvida que es difícil tener unas encías perfectamente limpias, si no se usan algún tipo de elemento de higiene interdental: "La mayoría de las personas consideran el hilo de seda como el mejor instrumento para limpiar los espacios entre los dientes. Sin embargo, esto no es así, ya que es el cepillo interdental el que tiene una mayor capacidad para arrastrar la placa que hay entre los dientes. El uso de este tipo de aditamentos no es sencillo y conviene que su dentista o higienista le ayude a seleccionar los cepillos más adecuados para su caso en particular".
